En el año 2009 el anterior gobierno del PSOE inició los trámites para preparar una ordenanza municipal contra el ruido, pero cuando el PP llegó al poder cayó en saco roto y nunca más se ha retomado. En la capital extremeña las quejas vecinales se centran en la turística calle José Ramón Mélida, sobre todo cuando llega el verano y los veladores.