Vivir en la opulencia es una de las causas de las abultadas cifras de obesidad, en progresivo aumento, que se registran hoy día en Extremadura y el resto del país. Ya lo advirtió el doctor extremeño José Enrique Campillo, catedrático en Fisiología y experto en nutrición y alimentación cuando publicó el El mono obeso en el 2004, pero la situación no parece cambiar a pesar de las nefastas consecuencias que conlleva esta enfermedad y que merma la esperanza de vida del país.

--Somos una de las regiones con más problemas de obesidad...

--Estamos entre las primeras comunidades con mayor tasa de obesidad, sobre todo obesidad central. Esto se refiere a la grasa acumulada en la barriga que es la más peligrosa desde el punto de vista cardiovascular. Según el estudio Idea, somos la comunidad con mayor riesgo de problemas cardiovasculares de toda España.

--¿Por qué hay tantas obesos?

--Es complejo, pero curiosamente las regiones que más sufren obesidad central --Extremadura, Canarias, Galicia y Andalucía-- son las que hace 60 o 70 años vivían en condiciones de gran pobreza. Y es que está demostrado a nivel mundial que una de las principales causas de padecer obesidad central, diabetes o enfermedad cardiovascular en la edad adulta es haber tenido un bajo peso al nacer. Es decir, la desnutrición del feto durante el desarrollo uterino es la principal causa de mortalidad cardiovascular y obesidad central. Un caso curioso es el de Holanda, donde hubo una hambruna tremenda hace 60 años y existe un pico elevado de problemas cardiovasculares en los nacidos en ese país en aquellos años.

--¿Y cómo es la situación de la obesidad infantil?

--Según el último estudio que hemos elaborado el 30% de los niños de la región tienen sobrepeso, de los cuales un 10% tienen obesidad. En este caso sí se mantiene a niveles de la media nacional.

--¿Influyen la cultura y sociedad?

--El nivel cultural contribuye pero hay regiones muy cultas con niveles muy elevados de obesidad. En Extremadura esta situación viene motivada porque muchas de las personas que ahora tienen 50 o 60 años nacieron con bajo peso.

--¿Podemos hablar de epidemia?

--Por supuesto, cada vez hay más obesos y más gente con sobrepeso, pero es algo lógico porque cada vez comemos mejor y nos movemos menos. En el libro El mono obeso hablo de las enfermedades de la opulencia, es decir, estamos en países desarrollados con gran cantidad de alimentos y no nos movemos. La prueba es que la epidemia de la obesidad y de diabetes del adulto --tipo B-- han sobrepasado todas las previsiones que había por el enorme incremento que se ha producido en la obesidad y en la diabetes en países emergentes como China e India. Es espectacular. Los chinos hace quince años vivían con una escudilla de arroz todo el día e iban en bicicleta a todas partes, pero hoy abundan las hamburgueserías y todo el mundo en coche, lo cual demuestra más que son manifestaciones de lo que llamamos la opulencia.

--¿A más edad más obesidad?

--Hicimos un estudio hace tiempo que reflejaba que en mayores de 55 años el sobrepeso alcanza casi al 60% de la población en Extremadura. En biología hay una regla universal, hay que moverse para consumir alimentos.

--Ante el aumento de obesos, ¿están fallando las campañas?

--Las campañas se hacen con un punto de visto erróneo. Para prevenir la obesidad infantil hay que tener claro el problema y es que los niños se mueven cada vez menos. La falta de ejercicio es lo que más influye en la obesidad del niño. Prácticamente un niño obeso come las mismas calorías que un normopeso, pero pasa muchísimas más horas delante de una pantalla, y la prueba está en los fabricantes de videojuegos, que ha visto las orejas al lobo y han comenzado a sacar otros juegos que invitan a moverse, lo que indica que el factor fundamental es el ejercicio. Son necesarias acciones fuertes que incidan en esto.

--¿Qué riesgos tiene un obeso?

--Tener grasa en las caderas puede ser un problema estético pero una ventaja desde el punto de vista cardiovascular. La obesidad central es la más peligrosa, esto es la acumulación de grasa en la barriga, es la madre de todas las patologías. Se empieza por ahí y se sigue con las alteraciones del colesterol, aparece la diabetes, la hipertensión y al final viene el problema cardiovascular grave. Eso está bien demostrado. La obesidad es el principal problema de salud que hay hoy en día, por encima incluso del consumo de tabaco, siendo este muy grave para la salud.

--¿La sociedad es consciente?

--Sí, la gente lo sabe, está muy mentalizada. La tele está todo el día avisando y las casas comerciales también para vender sus productos, pero uno tiene que coger las zapatillas y salir a pasear y a sudar simplemente. El problema es que la gente es muy cómoda. Es más fácil quedarse en casa picoteando.

--¿Es posible frenar esta epidemia?

--Creo que no, es muy difícil porque la gente cada vez come más y se mueve menos. En Badajoz, donde vivo, estoy harto de ver gente que coge el coche para desplazarse 300 metros. Es una cosa tremenda. Habría que motivar mucho a la gente, porque si no se toman medidas bastantes drásticas, como se ha hecho con el tabaco, que empieza a dar resultados, la gente no reacciona. Nos gustan las cosas que no nos cuesten esfuerzos. Creo que las autoridades no se están preocupando en absoluto de transmitir la actitud de hacer ejercicio a los jóvenes, y aún así los chicos todavía, pero cuando hemos preguntado que chica hace algún ejercicio físico es anecdótico. Y eso tiene sus consecuencias, la mujer ya ha descendido del tercer al quinto o sexto puesto en mayor esperanza de vida.