El II Plan de Salud Mental de Extremadura contempla, entre otras cosas, la "erradicación de los hospitales psiquiátricos como tales", conservando los edificios en Mérida y Plasencia, pero transformando sus funciones. El nuevo modelo prevé evitar los estigmas sobre estos enfermos, aumentar y adaptar los recursos asistenciales y fomentar la excelencia en la gestión.

Los equipos de salud mental contarán con 16 psiquiatras, 21 psicólogos, 15 enfermeros y seis trabajadores sociales más.

La Junta ha anunciado la creación de cuatro unidades de hospitalización breve para adultos y otra para niños, dos hospitales de día y una unidad de rehabilitación hospitalaria, que suman un total de 115 camas. Además, su intención es poner en marcha 22 pisos tutelados con capacidad para albergar a 88 pacientes y cinco centros residenciales con un total de 150 camas. Otra cuestión establecida es la apertura de un centro de atención para personas con discapacidad intelectual y otro para niños y jóvenes.