Los trabajadores de turnos de noche pierden cinco años de vida por cada quince de jornada laboral, según las conclusiones del último estudio médico elaborado en España sobre los empleos a turno. En Extremadura más de 50.000 extremeños tienen horarios atípicos en el trabajo (turnos diferentes cada cierto tiempo, trabajos de noche, en domingos y festivos, etc). Al igual que en el resto del país, en la región la cifra de este tipo de empleados cada vez es mayor, según los sindicatos, que achacan ese crecimiento al intento de amortización rápida de las inversiones por parte de los sectores productivos. Además, insisten en que, a pesar de que se sabe que este sistema de trabajo es negativo para la salud, los intereses económicos prevalecen sobre el bienestar de las personas.

Las conclusiones del estudio presentado la pasada semana por los doctores Eduard Estivill, jefe de la Unidad del Sueño del Instituto Dexeus de Barcelona, y Apolinar Rodríguez, responsable del Servicio de Neurofisiología del Hospital de la Paz de Madrid, indican, entre otras cosas, que los trabajadores con empleos a turno se divorcian tres veces más que el resto de sus compañeros y tienen un 40% más de posibilidades de padecer trastornos neuropsicológicos, digestivos y cardiovasculares, algo que, aseguran, supone un gran sobrecoste a la Seguridad Social.

Estivill sostiene que el desajuste horario no sólo desincroniza al ser humano fisiológicamente al sufrir una reducción de sus defensas inmunitarias por insuficiencia de luz, "sino que también le produce desequilibrios sociales y psicológicos al verse abocado a vivir al revés".

Por su parte, Enrique Daniel, jefe de la Unidad de Psiquiatría del Hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres, discrepa en cuanto a los problemas psicológicos originados por este tipo de horarios, pero sí reconoce que es normal "que se produzcan trastornos del sueño, que no es poco, y como consecuencia de ello pueden aparecer otras cosas como irritabilidad o problemas en las relaciones familiares o con los compañeros". Daniel insiste en que los principales problemas se dan en las personas que tienen turnos rotatorios.

La unidad del sueño de Cáceres suele tratar a trabajadores que cambian constantemente de turno. Uno de los mayores especialistas del país en enfermedades del sueño, junto a Estivill, es el doctor Fernando Masa, jefe del Servicio de Neumología del Hospital San Pedro de Alcántara, quien sostiene que esta forma de trabajar provoca trastornos del sueño "y como consecuencia de ello aparecen dos síntomas: el insomnio o la somnolencia. Se duerme mal y poco y este tipo de cambios y alternancia en las horas en las que se duerme también provoca otras enfermedades del sueño, como la apnea".

LOS MOTIVOS La causa principal de los trastornos es que el descanso diurno es poco reparador, ya que durante el día los parámetros biológicos tienen unas constantes naturales diferentes a las de la noche, en que el organismo se prepara para descansar. "Lo más correcto es dormir durante la noche, ya que hay una serie de sustancias que se liberan durante el sueño y de noche, algo que no ocurre si se duerme de día", advierte Masa.

Es decir, los ritmos biológicos naturales y saludables coinciden con el día y la noche, y a ellos el cerebro responde enviando al organismo órdenes de actividad. En el trabajador nocturno se produce un desajuste de su ritmo natural, lo que se traduce en una predisposición a la fatiga.

Por otra parte, los accidentes laborales con mayores consecuencias suelen ocurrir de noche. Las estadísticas indican que casi nueve de cada diez siniestros considerados muy graves se registran en ese turno. Isabel Bernabé, técnico de Salud Laboral de UGT en Extremadura, señala que esta mayor siniestralidad se produce "porque se alteran los ritmos generales de vida y se baja la concentración y la atención, por lo que el trabajador está más expuesto a tener un accidente".

Bernabé destaca que los sindicatos suelen prestar atención a las condiciones de trabajo de estos empleados. "Cuando trabajamos con empresas que tienen estos sistemas de trabajo se incide especialmente en las evaluaciones de riesgo y, entre otras cosas, también insistimos en los reconocimientos médicos y vigilamos que se establezcan las medidas adecuadas para ello".

Aseguran los especialistas que los trastornos derivados de estos turnos implican la astenia física y psíquica, lo que origina dificultades para realizar esfuerzos. Por ello, sostienen los médicos, los trabajadores de edades más avanzadas son más vulnerables a este tipo de problemas y tienen

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