La Encuesta de condiciones de vida 2004 del Instituto Nacional de Estadística (INE) analiza diversos aspectos de la realidad socioeconómica de las diferentes comunidades autónomas que van desde el nivel educativo a la población a la situación y equipamiento de las viviendas.

De esta forma, el estudio se ha basado en una muestra de unos 15.000 hogares repartidos por toda la geografía española y el INE ya ha anunciado que pretende desarrollar aspectos más detallados de diversos asuntos a lo largo de los próximos meses. El gran objetivo es facilitar unos parámetros comunes a todos los países de la Unión Europea que permitirán que el año Eurostat ofrezca datos de todos los países. Además, facilita el conocimiento del perfil del extremeño de hoy.

Para empezar, es cada vez más evidente que los españoles --y por ende también los extremeños-- apuestan por comprar una vivienda en lugar de alquilarla, algo lógico si se tiene en cuenta que en la región el coste mensual de una hipoteca es muy similar al de un alquiler. De esta forma, el 80% de las familias extremeñas vive en una vivienda que es de su propiedad. Otro 6,3% paga un alquiler a precio de mercado, mientras que un 3,6% paga menos de ese precio y casi un 10% reside en régimen de cesión gratuita .

Problemas más comunes

A la hora de analizar los problemas de las viviendas, algo más de la mitad de las familias asegura que su casa no sufre ningún problema. El resto de los hogares sí que tiene algunos inconvenientes, siendo el más normal el exceso de ruido, ya sea por parte de los vecinos o desde la calle, lo que afecta al 21,4% de las viviendas. Casi un 20% de los hogares está mal iluminado, y otro 10% de las familias denuncia la contaminación de la zona, un porcentaje similar al que se queja de la delincuencia y el vandalismo de su barrio.

Otro de los aspectos interesantes que aborda el estudio del INE se refiere al cambio de puesto de trabajo. En Extremadura cerca de 30.000 personas han cambiado de empleo en el último año, lo que supone un 8,1% de la población ocupada. Sin embargo, el análisis de las causas incide en uno de los grandes déficits del mercado laboral extremeño: la temporalidad. Así, en España el motivo más habitual para cambiar de trabajo es "conseguir un empleo más adecuado", mientras que en Extremadura la causa más común es "la finalización de un contrato temporal".

Por último, en el ámbito educativo el INE señala que casi el 10% de los adultos extremeños (más de 84.000) está estudiando en estos momentos, la mitad de ellos una carrera y la otra mitad los diferentes niveles de Educación Secundaria. En cuanto al nivel actual de formación, el más habitual en la comunidad es la primera etapa de Educación Secundaria (superior a la media nacional), pero sólo un 17,5% ha completado estudios superiores (por el 21,8% nacional).