Hacer más atractiva la región para los investigadores. Este es uno de los objetivos del nuevo decreto por el que se establecen las bases reguladoras de las ayudas para el fortalecimiento de la I+D+i mediante la movilidad de investigadores posdoctorales. Aún está en fase de exposición pública pero se pretende que este colectivo, tras superar la fase predoctoral, siga con su formación en el extranjero dos años y regrese el tercer año a Extremadura para incorporarse a los centros de investigación de la región o a la universidad, «que vuelvan al lugar de partida», explica Jesús Alonso, secretario general de Ciencia.
Hasta ahora este decreto fijaba solo ayudas para las estancias extranjeras de dos años. «Hoy por hoy las condiciones que pueden existir en muchos lugares son más excelentes que las que podamos tener aquí y esto hace muy difícil que un investigador vuelva a Extremadura tras ese periodo en centros de excelencia extranjeros, por eso incluimos la posibilidad de un año más de ayuda para posibilitar ese retorno del investigador y del conocimiento que ha adquirido fuera y que también ayudará a mejorar la capacidad de I+D que tenemos en la región», apunta Alonso. De esta forma, durante ese año extra estas personas pueden ir clarificando su carrera investigadora «sin tener que irse al paro». En concreto, con este decreto se convocarán unas 20 ayudas que consisten en un salario de en torno a 22.000 euros netos por persona y año. «Hemos perdido mucho personal en los últimos años y queremos potenciarlo». g. m.
