Como no podía ser de otro modo, el nombramiento de los nuevos integrantes del Gobierno extremeño ha suscitado opiniones dispares, y mientras desde el PSOE se alaba el acierto en la elección por parte del presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el PP cree que son cambios insustanciales e IU afirma que se configura un Ejecutivo "más presidencialista".
Por la parte socialista, su portavoz parlamentario, Luciano Fernández, aseguró que se ha escogido "a las personas adecuadas para el momento adecuado", y mostró su satisfacción por "el acierto demostrado por el presidente".
En cuanto a cada uno de los elegidos, Fernández mostró la "íntima satisfacción" del grupo parlamentario porque se haya dado responsabilidad de Gobierno a la portavoz adjunta del PSOE en la Asamblea, Lola Pallero. Respecto a Ignacio Sánchez Amor, el diputado socialista, además de destacar el acierto de crear la Vicepresidencia, destacó la "preparación, capacidad y experiencia" del elegido. Finalmente, en lo que se refiere a Leonor Martínez Pereda, calificó de "magnífica noticia" la incorporación de una persona "que conoce la consejería y tiene experiencia" en los asuntos que va a llevar en su nuevo cargo.
MAS DE LO MISMO Por su parte, el diputado del PP, Tomás Martín Tamayo, aseguró que los nombramientos son "insustanciales", como lo serían los ceses, porque, a su juicio, se repite "más de los mismo".
Para Tamayo, el problema del Gobierno regional "es el propio Ibarra y no sus consejeros", y mostró su sorpresa y satisfacción por el cese de Manuel Amigo como portavoz del Gobierno tras siete meses en el cargo, a quien considera un portavoz que en este periodo a demostrado su "inutilidad", y además era "infumable" porque era "incapaz de transmitir ni una sola iniciativa del Gobierno, y lo único que repartía eran iniciativas del propio Partido Socialista".
Teresa Rejas, portavoz en la Asamblea de IU, también aludió al cese de Amigo por sus errores, y aseguró que los nombramientos de Pallero y Martínez Pereda "estaban cantados", mientras que el de Sánchez Amor "le resarce del ostracismo que se le había impuesto".
En cualquier caso, indicó que el Gobierno actual "es de los más flojos de la historia" y refuerza "el carácter presidencialista y el aire de caudillismo de Ibarra, con un Gobierno de más callar, con menos peso político".
