El incumplimiento de horario es una falta leve que se transforma en grave cuando sucede en un local tres veces en un mismo año, cuyas multas oscilan entre los 300,50 euros y los 3.000 euros dependiendo del grado de reincidencia, y que incluso puede derivar en el cierre del local. Es lo que le sucedió a la discoteca Buda y el pub La Cruzada, ambos en Mérida, el año pasado tras acumular hasta 12 y 13 expedientes de sanción respectivamente por quebrantar el horario de cierre estipulado a las 4.00 horas para el primero y las 2.30 para el segundo. Pese al recurso los locales se vieron obligados a cerrar tras el decreto de cierre temporal dictado por el consistorio emeritense.