Raúl es el presidente de la Fundación Ciencias de la Documentación en Plasencia y tenía previsto volar ayer a las 12 de la mañana a Santiago de Compostela para participar en un congreso internacional al que asistirán más de mil personas. No pudo coger el vuelo porque su avión se canceló, por lo que tomará las medidas legales que corresponda. "Todos tenemos derecho a la huelga, pero creo que aquí hay cosas que tiene que decidir un juez. Somos miles de personas indefensas, los controladores están haciendo lo que quieren con nosotros y no hay derecho", decía indignado.

Tras haber gastado unos 3.000 euros en billetes, la fundación decidió fletar un autobús para trasladar a los que iban a asistir al congreso a Galicia. "Pero esto no es solo una cuestión de dinero, sino también de imagen. Está previsto que al congreso asistan personalidades políticas y culturales de Colombia y México que ni siquiera sabemos si podrán aterrizar", señalaba.