La sanidad extremeña goza de buena salud. Al menos así se desprende del diagnóstico realizado por los usuarios del sistema a través del último Barómetro Sanitario , realizado sobre la situación del año 2005 por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

El estudio recoge que los extremeños conceden un aprobado alto al sistema regional de salud. Concretamente le otorgan un 6,30, dieciséis décimas por encima de la nota media dada en España. Esta calificación concuerda con la valoración general que realizan sobre el SES, ya que el 64% de los extremeños cree que funciona bien. No obstante, también es cierto que casi tres de cada cuatro entrevistados opina que necesita cambios.

Asimismo, en lo que se refiere específicamente a la medicina general que reciben en los consultorios, centros de salud y hospitales de la comunidad autónoma, ocho de cada diez usuarios destacan que la atención que reciben es buena o muy buena.

Mejoras en Primaria

La encuesta encargada por el Ministerio de Sanidad también pone de manifiesto que, a pesar de los problemas originados por el supuesto déficit de médicos, dos de cada tres extremeños reconocen que la Atención Primaria en la región ha mejorado durante los últimos cinco años. Esto sitúa a Extremadura como la comunidad autónoma donde mayor reconocimiento tienen los esfuerzo hechos por las Administraciones para optimizar el servicio que prestan médicos de cabecera y otros grupos complementarios.

Sin embargo, este aspecto aparece en los últimos lugares de la memoria de los usuarios cuando se les pide que destaquen los grandes avances de la sanidad extremeña en los últimos años. Unicamente tres de cada 100 mencionan las mejoras realizadas en Atención Primaria, mientras que entre las acciones mejor valoradas están el aumento de recursos en la Atención Especializada y la reducción de los tiempos de espera para intervenciones quirúrgicas y hospitalizaciones. Además, un 12,4% reconoce que en Extremadura se ha producido un aumento de la cifra de médicos.

El barómetro del 2005 también registra cuáles son los servicios mejor valorados por los pacientes. Así, el trato recibido, la confianza que reciben del médico, así como la información sobre su problema de salud, son las funciones que más destacan los extremeños.