El último golpe policial al contrabando de tabaco en la región se desarrolló el pasado 29 de octubre en la provincia cacereña. Funcionarios del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Tributaria detuvieron a cinco personas, tres de ellas de nacionalidad portuguesa y dos españoles, en una nave de Casar de Cáceres. En la operación se aprehendieron más de 700.000 cajetillas de tabaco de contrabando. Los hechos sucedieron cuando los funcionarios de Vigilancia Aduanera detectaron en las proximidades de Cáceres un camión con matrícula francesa que transportaba un contenedor, cuyos movimientos resultaron sospechosos a los funcionarios, que procedieron a seguirlo hasta una nave en el recinto industrial de Casar de Cáceres, en la que se encontraban un gran número de cajas sin inscripciones, las cuales contenían tabaco sin la reglamentación correspondiente. El contenedor que transportaba el camión procedía de la ciudad francesa de Marsella y el destino de los cigarrillos intervenidos era casi con toda seguridad el Reino Unido.
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