Un estudio de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU) divulgado la pasada semana, revela las catastróficas consecuencias que para las universidades de Irak ha tenido la guerra. "Desde el inicio de la guerra en el 2003, el 84% de la infraestructura de las instituciones de educación superior fue quemada, saqueada o destruida de algún modo. Además de que 48 académicos han sido asesinados y muchos más se encuentran bajo amenazas", indica el citado informe.

Los autores del estudio hacen un llamamiento a la comunidad internacional para que aporten fondos para reparar el sistema de educación superior en Irak, que contaba con tradición y prestigio mundial desde que se fundó la Universidad de Bagdad en 1957.