El primer juicio por el robo de hijos de desaparecidos durante la dictadura que gobernó en Argentina de 1976 a 1983 ya ha comenzado en La Plata (a 60 kilómetros de Buenos Aires) con el caso del secuestro de una descendiente de uruguayos. Las audiencias orales y públicas se iniciaron el jueves con el excomisario Miguel Etchecolatz y el médico policial Jorge Bergés. Dos símbolos de la represión ilegal del régimen militar en el banquillo de los acusados. Un tribunal federal de La Plata está a cargo del juicio por el secuestro, apropiación ilegal y cambio de identidad de Carmen Castro Sanz. Según el fiscal, el matrimonio integrado por los uruguayos Eduardo Gallo Castro y Aída Celia Sanz fue secuestrado a finales de 1977 a las afueras de Buenos Aires por un comando policial que respondía a las órdenes de Etchecolatz. La pareja está en la extensa nómina de desaparecidos y la mujer fue vista por última vez con vida en la cárcel ilegal conocida como Pozo de Banfield, en los sótanos de una comisaría, cuando dio a luz a una niña el 27 de diciembre de 1977.
