Shiro es todo un profesional pero, como perro viejo, sabe que nunca llegará a ser tan popular como Mugi-chan, uno de los cinco chihuahuas que se alquilan con él en la selecta tienda Puppy the World de la isla tokiota de Odaiba donde, previo pago, cualquiera puede pasear un can por 1.900 yenes (12 euros) la hora.