Síguenos en redes sociales:

PROBLEMAS DE ESPACIO PARA LOS MUSICOS

Desalojados tres grupos de música de su local de ensayo

La policía invita a los jóvenes a que se vayan por una orden del ayuntamiento Estima

Desalojados tres grupos de música de su local de ensayo

Tres grupos de música que ensayan en un local alquilado en la calle Hernando de Soto fueron desalojados en torno a las 20.30 horas de ayer por agentes de la policía municipal, que hacían cumplir así la orden de desalojo dictada por el ayuntamiento, que considera que este local no reúne las condiciones necesarias y que carece de la licencia de apertura correspondiente para ejercer este tipo de actividad.

Los afectados no entienden el posicionamiento del consistorio. Anoche reconocieron que utilizan este local como lugar de ensayo, pero que no realizan ninguna actividad abierta al público, por lo que, a su juicio, no necesitan licencia. "Es como el que ensaya en casa", apuntaba uno de los músicos. Consideran que no están contraviniendo ninguna normativa: "Entenderíamos que el ayuntamiento vigilara el exceso de ruidos, pero no comprendemos que nos cierren por el asunto de la licencia".

El caso de anoche ha vuelto a poner de manifiesto la ausencia de lugares de ensayo que hay en la ciudad y las dificultades por las que tienen que atravesar los jóvenes creadores para desarrollar su afición.

Este local está situado muy cerca de la plaza Marrón, justo al lado de unos aparcamientos que utiliza el Cuerpo Nacional de Policía de Cáceres. En él ensayan los grupos Wamtún Frito, CRK y Okamon. Los chavales lo alquilaron hace dos años, pagaban un alquiler mensual de 350 euros. Con su esfuerzo, acondicionaron e insonorizaron las paredes con métodos tan arcaicos y tradicionales como colchones y cajas de huevos, que compraron en Reto. "Llenamos cuatro camiones de colchones", subrayó uno de los jóvenes.

Los afectados (dicen que algunos vecinos habían mostrado quejas por el desarrollo de esta actividad) explican que el consistorio les envió una carta de apercibimiento y ellos presentaron un recurso. "Sin embargo, el ayuntamiento resolvió que nos cerraban porque realizábamos actividades que necesitaban licencia de apertura". Así las cosas, la única salida que les queda a los grupos es recurrir a la justicia, algo difícil porque "si no teníamos casi dinero para pagar la luz, ¿cómo vamos a contratar un abogado, donde meteremos ahora nuestras baterías?", se preguntan.

Pulsa para ver más contenido para ti