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el presidente de la asociación asegura que "no hay quien duerma"

Vecinos de La Madrila de Cáceres exigen soluciones al ruido de los fumadores

Vecinos de La Madrila de Cáceres exigen soluciones al ruido de los fumadores

Los residentes de una conocida zona de copas de Cáceres exigen que se tomen medidas para solucionar "el problema" del ruido que generan los fumadores fuera de los locales, ya que aseguran que "no hay quien duerma" en el barrio con "esto del cigarrón".

Así lo ha expuesto a Europa Press Televisión el presidente de la asociación de vecinos de La Madrila, Miguel Salazar, quien ha explicado que de nuevo "ha surgido un follón" en esta zona de movida con la prohibición de fumar en los locales, tras haber conseguido en los últimos años "resolver un poco este problema" de ruidos.

"Ahora ha surgido el fenómeno de fumar fuera en la calle porque en los bares no pueden y con esto hay 50 clientes dentro y 50 fuera, en la puerta, relevándose. En una mano llevan la copa, bebiendo en la puerta y en la otra el cigarro", según ha observado.

Esto hace que la situación "se agrave" y "ahora no hay quien duerma", ha lamentado. Además, este responsable vecinal ha apuntado que se trata de una zona donde muchos de los establecimientos "no cierran" a la hora establecida, lo que motiva que los residentes tengan que soportar "la gente hablando hasta las diez de la mañana". "Nadie se puede hacer una idea si no vive aquí", ha aseverado.

De momento, desde esta asociación se "están haciendo gestiones políticas para ver que solución se le da" a este problema con el objeto de conciliar la vida vecinal y la diversión nocturna.

Asimismo, Miguel Salazar ha explicado que el pasado fin de semana algunos vecinos de la zona han tirado "cubos de agua" a varios fumadores, al no poder conciliar el sueño por las conversaciones que mantenían mientras fumaban.

Ante esta situación, a juicio de Salazar, "tampoco hay que alarmarse" si se tiene en cuenta el "nivel de ruidos" que soportan los vecinos. "Yo no quiero dar ideas pero si tiraran ruedas de molino tampoco me sería muy sorprendente", ha concluido.

Por su parte, algunos de los hosteleros de la Madrila han observado que de momento "no" hay quejas vecinales, ya que "los que se quejan son los clientes porque no pueden fumar dentro", según ha precisado uno de ellos, Sergio, lo que a su vez está motivando pérdida de clientela en su local.

"Yo ya he despedido a dos porque no viene nadie", ha indicado este empresario quien además ha subrayado que la decisión de prohibir fumar en los establecimientos "está perjudicando a todos". "Esto es un desastre", ha lamentado.

Otro de los inconvenientes de la nueva ley para los hosteleros es que les resulta "un problema" el "tener que estar cuidando de la gente dentro" de los locales, lo que consideran "difícil" en especial cuando los fumadores "se encierran" en los servicios, ante lo que se preguntan "¿cómo entrar al servicio de chicas?".

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