El pleno de la corporación local acordó ayer adherirse al convenio para la creación de un fondo social para la vivienda, que cuenta con 6.000 pisos aportados por los bancos y que se destinarían, en régimen de alquiler, a las familias que hayan sufrido un desahucio de su vivienda. Según la explicación que se dio ayer en el pleno, el ayuntamiento, a través del Instituto Municipal de Asuntos Sociales, participaría en labores de asesoramiento para la selección de los solicitantes.

Sin embargo, durante el debate de la moción presentada por el gobierno local el portavoz del grupo municipal socialista, Vicente Valle, detalló que en Cáceres solo hay cinco viviendas dentro de este fondo, de las que cuatro las ha aportado Liberbank. La alcaldesa, Elena Nevado, admitió que son "insuficientes", pero recordó que es necesario el acuerdo del pleno de la corporación de adhesión para que esos cinco pisos se pueden entregar.