Emilio Rey es el propietario del restaurante El Pato, un negocio con cerca de medio siglo de existencia. Considera que cada día bajan más cacereños a la plaza, y a pesar de la crisis "este año está equilibrado respecto al anterior". "Todavía es principio de verano, pero estamos contentos", afirma. Sobre su negocio indica que la calidad y el buen servicio constituyen sus características hoy por hoy, y que ésa es la bandera que defienden y con la que están satisfechos.

Pero Emilio Rey no comparte el nuevo sistema de hostelería que se ha empezado a establecer en la plaza. Cree que la ley tampoco lo comparte y piensa que alguien tendrá que tomar las medidas oportunas ante lo que califica como una "competencia desleal, que no ofrece realmente lo que se oferta". Considera que se engaña al público en una de las "fábricas" más importantes de Cáceres, que es el turismo, y pide al ayuntamiento que tome cartas. "Si hace falta sancionar, que sancione", reitera.