La Diputación de Cáceres celebró ayer los actos con motivo de su patrón, San Pedro de Alcántara, en los que se rindió homenaje a 17 trabajadores de la institución provincial que se jubilan este año. Fue el momento más emotivo del tradicional evento que este año tuvo lugar en la víspera de la festividad, que coincide hoy con un día no laborable. Laureano León, presidente de la diputación, y los portavoces del PP y PSOE, Saturnino López Marroyo y Miguel Angel Morales, respectivamente, fueron los encargados de hacer entrega de los regalos a los jubilados. Como también es tradición, Santa María acogió una misa y hubo procesión de la corporación acompañada de los maceros.

Ante una nutrida representación institucional, León tuvo palabras de reconocimiento en su discurso para la plantilla de "la casa", con un mensaje de optimismo para lo que resta de legislatura, vislumbrando la salida de la crisis tras los dos primeros años de gobierno que, dijo, "habían sido complicados". El presidente de la diputación avanzó que los presupuestos del 2014 serán "inversores y expansivos" y detalló que los municipios tendrán garantizado un plan bianual de 40 millones para nuevas infraestructuras.

Valiente en sus palabras, León reconoció "los sacrificios" que había tenido que realizar la diputación y admitió que, "aunque había tenido que tomar decisiones difíciles, eso es lo que se espera de cualquier responsable público". Reivindicando "el papel activo de los políticos", el máximo responsable de la institución puso como ejemplo el consenso alcanzado para un nuevo acuerdo-convenio.

Entre los proyectos para lo que resta de legislatura, citó la puesta en marcha de un centro documental que aúne el legado histórico de la institución, el parque cultural de la Sierra de Gata o la promoción de Gredos y Tierras de Granadilla.