En el Cefot se respira un ambiente muy distinto. Tras año y medio sin formar nuevos soldados, función principal y casi exclusiva de la base cacereña (salvo algún otro programa de oposiciones y enseñanza complementaria), los 611 jóvenes pertenecientes al único ciclo convocado por el Ejército llegaron el lunes y han devuelto la esencia a la unidad: compañías llenas de vida, comedores abarrotados... Este fin de semana es el primero de salida por la ciudad, y seguro que la hostelería ya lo nota. Sin embargo, en cuatro meses la base volverá a su silencio y las expectativas no son halagüeñas: la disposición adicional decimotercera del Proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2014 vuelve a reducir el máximo de efectivos del Ejército de 80.000 a 79.000. Evidentemente no es la mejor noticia para esperar la convocatoria de nuevas plazas.

¿Volverá el Cefot a sumirse en un largo periodo de inactividad? En 2010 sólo una hubo una oferta de 325 plazas, en 2011 volvió a aumentar a 4.300, en 2012 no se publicó ninguna convocatoria, y en 2013 se ha vuelto a un único ciclo con 611 soldados para Santa Ana. ¿Cuánto resistirá la base así? ¿Defensa la mantendrá abierta con sus 200 mandos y personal civil pese a todo? De momento no hay respuesta, pero sí incertidumbre. Este diario ha trasladado la cuestión a los partidos que representan la voluntad popular en Cáceres y, curiosamente, coinciden en la conveniencia de que la base tenga más funciones para que su pervivencia no dependa en exclusiva de la llegada de reclutas.

QUE NO DECAIGA "Nos preocupa la continuidad de la unidad, por ello volveremos a plantear enmiendas a los Presupuestos Generales con el fin de que se garantice su futuro", explica Vicente Valle, portavoz municipal del PSOE, recordando que en estos momentos se trata de un recinto muy bien valorado por los altos mandos que visitan la unidad, y en óptimas condiciones para llevar a cabo su función. "Mientras haya actividad hay mejoras y mantenimiento, pero tememos que a costa de no tener soldados pueda deteriorarse y favorecer que se desmantele", subraya. Por esta razón, el PSOE propone que el Ejército asigne al Cefot otra función, además de la instrucción de nueva tropa. "Podría ser un centro nacional de formación continua, de reciclaje, tanto de tropas como de mandos. Se trata de una labor necesaria en todos los sectores", indica Valle.

El techo máximo de efectivos del Ejército ha caído de 86.000 a 79.000 en cuatro años, un descenso que va directamente en detrimento de la actividad del Cefot, donde lógicamente se forman menos reclutas. Frente a ello, los socialistas destacan la "importante fuente de ingresos" que supone el cuartel para la ciudad, de ahí la necesidad "de prevenir" en lo posible con propuestas y alternativas. "Santa Ana es el auténtico plan de comercio de Cáceres, la alcaldesa tiene que tener más peso en este sentido", insiste Vicente Valle.

AMPLIAR EXPECTATIVAS Por su parte, el portavoz del Gobierno municipal, Valentín Pacheco, también subraya que "es meta de todos que el centro amplíe sus expectativas, convirtiéndose en academia, en centro de reciclaje..., en definitiva, que tenga actividad todo el año independientemente de la convocatoria de la oferta pública de plazas". Y por supuesto, "cuantos más soldados vengan, mejor", afirma. Por ello, de momento Valentín Pacheco destaca "la magnífica noticia" que la llegada de los 611 nuevos alumnos supone para Cáceres. "Hemos trabajado muchísimo para que esto sea una realidad. La senadora Elena Nevado ha hecho mucho más de lo que se puede o se debe contar abiertamente", señala.

De hecho, la transformación del Cefot en academia militar es una de las opciones que se vienen barajando de puertas para adentro, según ha podido saber este diario, aunque en el momento actual de crisis ninguna alternativa tiene garantías de viabilidad. En tal caso, la conversión de centro formativo en academia exigiría precisamente la dotación de más contenidos, pero también de más presupuesto inicial, de ahí que los recortes actuales no hagan vislumbrar por ahora ninguna opción concreta. Lo que sí parece claro es que el Ejército está reorganizando estructuras para adaptarlos a los cambios vividos por la institución en los últimos años.

"No conocemos las decisiones internas de alto nivel, si puede haber otra función para el Cefot, pero cuando se han aportado este tipo de ideas nos han parecido magníficas, daría más estabilidad a la base", subraya el portavoz del Gobierno municipal. En cambio, Valentín Pacheco sí deja la puerta abierta al optimismo en este asunto: "Parece que adquiere más fuerza la idea de que la base seguirá abierta, cada día hay más esperanzas, es cierto y es indudable", señala.

"SE ESTA MARCHANDO" Por su parte, Izquierda Unida considera que el Ejército "ya se está marchando de la ciudad, solo hay que preguntarse cuánto tiempo ha estado la base sin soldados, y el personal del Cefot sin trabajo, que por cierto pagamos todos", indica Margarita López Jubete, portavoz de IU en el ayuntamiento. Además, considera que "la capital cacereña es una malquerida del Ejército, que se va sin despedirse, sin agradecer todo lo que esta ciudad le ha estimado. El Ejército está en deuda con Cáceres", matiza, recordando "la recalificación de terrenos, el pelotazo del Infanta Isabel, sin que al final este cuartel se ceda al ayuntamiento".

Pese a ello, la portavoz es consciente de la importancia del Cefot para el comercio y la hostelería. "Da gusto ver a tantos jóvenes llegados con la convocatoria de plazas, se les recibe con los brazos abiertos". Por esa razón, agrega, "nos gustaría que Defensa se tomase la cuestión de la base cacereña en serio y que también la alcaldesa aclarase definitivamente su postura, ya que como senadora votó en contra

de una enmienda a favor del centro, mientras mantiene una pancarta en el balcón municipal", lamenta. Finalmente, recuerda que municipios más pequeños y peor comunicados tienen mayor concentración de efectivos militares.

También la Federación Empresarial Cacereña muestra su interés por la continuidad de la base, ya que constituye una considerable fuente de ingresos para una ciudad donde la industria apenas tiene peso y faltan otros recursos. "La llegada de los nuevos alumnos resulta muy positiva para las empresas de la ciudad, es un signo de pervivencia, pero esperamos que no sea algo puntual, sino que exista una clara intención de continuidad y una mayor dotación en los próximos presupuestos", declara Pedro Rosado, secretario de la Federación Empresarial Cacereña.