Para el PSOE el pacto con Cs pone en riesgo la estabilidad en los presupuestos

El Grupo Municipal Socialista considera «exagerada» la recaudación prevista en multas y cree que es «una nueva forma de inflar los ingresos» en el presupuesto, «como en el pasado hiciesen con las enajenaciones de terrenos, cuando la realidad es que se pretende hacer pagar a los cacereños y cacereñas la bajada del IBI pactada con Ciudadanos para sacar adelante los presupuestos».

Cabe recordar que el presupuesto para 2018 asciende a casi 69,2 millones de euros y será aprobado en el pleno de diciembre gracias a un pacto con Cs, a tenor del cual el equipo de gobierno municipal se ha comprometido a bajar el IBI. Las cuentas contemplan inversiones como la rehabilitación de la muralla, la ampliación del parque del Príncipe, las escaleras mecánicas de la calle Alzapiernas o la peatonalización de un tramo de la calle Viena.

El portavoz municipal socialista, Luis Salaya, considera «inaceptable que se pretenda hacer pagar en multas de tráfico una bajada del IBI mínima, que no tendrá ni la más mínima repercusión en las economías de las familias cacereñas, como ya hemos demostrado con datos económicos que lo corroboran».

Y añade que todos los esfuerzos del portavoz del equipo de gobierno, Rafael Mateos, destaca Salaya, «se centran ahora en intentar tapar ‘con ruido’ y ataques injustificados al PSOE el error de la titular de economía, al no entregar la documentación necesaria para iniciar el trámite presupuestario, con el único objetivo de no perder ventaja en el débil equilibrio de fuerzas existente entre quien lidera el PP actualmente (Elena Nevado) y quien aspira a apartarla del cargo (Rafael Mateos)». Cabe recordar que la semana pasada Mateos acusó de esto mismo a Salaya, es decir, dijo que el portavoz socialista había anunciado la impugnación del presupuesto para hacerse notar en la pugna que mantienen la concejala de su partido, Belén Fernández, y él por lograr la presidencia del PSOE local.

«DESCOORDINACIÓN» / «La descoordinación del equipo de gobierno empieza a ser alarmante», afirma Salaya, «pues mientras el concejal de Participación intenta poner en nuestra contra a las asociaciones diciendo que la impugnación del presupuesto retrasará las inversiones, su portavoz, Rafael Mateos, afirma que se mantendrán los plazos previstos», añade. Con la impugnación, asegura, lo que pretende el PSOE «es que se garanticen los presupuestos y no nos encontremos con ninguna sorpresa en el futuro». Y añade que consideran «ridículos» los ataques del portavoz popular porque el PSOE no haya hecho propuestas al presupuesto. «No podemos hacer propuestas a un presupuesto que ni siquiera hemos visto y que nadie conoce, porque correríamos el riesgo de que las mismas provoquen inestabilidad presupuestaria, como ha sucedido con la bajada del IBI propuesta por Ciudadanos», concluye Luis Salaya.