Cuando el turismo va viento en popa, hay negocios al margen de los alojamientos y la restauración que también reciben algunos beneficios en Cáceres. Es el caso de las tiendas, sobre todo las situadas en el entorno de la plaza Mayor y la Ciudad Monumental, que perciben positivamente la apertura de los apartamentos en viviendas y calles que se estaban quedando sin vida.

Así lo explica Diego Bravo, propietario de un establecimiento con solera y nombre propio en Cáceres, Retales Manolo. Abierto en 1968, su ubicación en la calle Moret le permite tomar el pulso a la evolución de la ciudad como si del mejor analista se tratara. «El boom de los apartamentos ha sido importante durante estos años, mucho, y además en distintos aspectos. Nosotros lo hemos notado tanto por las compras que nos hacen los distintos propietarios para vestir esos apartamentos nuevos con sábanas, cortinas, colchas o toallas, como por la cantidad de turistas que vienen a la ciudad, que suelen picar algo cuando lo ven en la tienda», revela.

Y es que Retales Manolo dispone de uno de los escaparates más estratégicos de la ciudad, en Moret, justo a la bajada de Alzapiernas y frente a la embocadura de Paneras. Por allí pasan todos los turistas que llegan hasta el parking de Galarza en sus propios coches o en autobuses. «Les gusta llevarse recuerdos, un cojín, cualquier detalle que haga alusión a Cáceres, por eso afectó tanto la pandemia», indica Diego Bravo.

«Durante ese tiempo –prosigue--, se notó radicalmente la parada de la actividad de los apartamentos, por supuesto en general de los visitantes. Fue una pena, ni un turista, ni una excursión», relata. Sin embargo, «la gente tiene otra vez muchas ganas de viajar y Cáceres se está beneficiando de ser una ciudad de interior, del miedo de las personas a salir todavía fuera de España, y volvemos a notar mucha afluencia los fines de semana», aplaude. La asignatura pendiente tras la pandemia son los turistas extranjeros, que aún no han regresado. «Empezaron a venir muchos asiáticos, pasaban por nuestra puerta, pero no se han vuelto a ver. De momento se compensa con la cantidad de visitantes nacionales», apunta.