ACTO DE ENTREGA EN EL GRAN TEATRO AL ORFEÓN CACEREÑO

Medalla de Cáceres a 120 años de polifonía

Su presidente, Juan Carlos Bravo, agradece emocionado el gesto y el acalde Mateos lo califica de símbolo cacereñista  

Es el colectivo cultural más antiguo de Extremadura y uno de las más longevos de España

Un documento alumbró en 2018 que la creación del Orfeón no se remontaba a 1964, sino a 1903

Cantó la Marcha Real a la llegada de Alfonso XIII a Cáceres en 1928 y actuó en la Expo de Sevilla de 1929

Eduardo Villanueva

Eduardo Villanueva

Muchas generaciones han pasado por esta centenaria agrupación polifónica, el Orfeón Cacereño, que es el colectivo cultural más antiguo de Extremadura y uno de las más longevos de España. También conocido como Masa Coral Cacereña, el orfeón se echó más de 60 años encima cuando se descubrió que su origen era mucho más profundo de lo que se creía. Y pasó de celebrar medio siglo de vida a contar más de 100 años. No pudo celebrar su centenario en 2003 porque no sabía que, en efecto, arrastraba un siglo de vida a sus espaldas. Por eso, esta efeméride, que le hace lucir sus 120 años, ha sido tan importante para el colectivo, para el que no hay mejor regalo de aniversario que la Medalla de Cáceres, que ha recibido esta noche de manos del alcalde, Rafael Mateos, y el concejal de Cultura, Jorge Suárez, en el Gran Teatro.

Arraigo y proyección

Una distinción que reconoce su identificación con la ciudad, su arraigo social y la proyección internacional que sigue dando a la capital cacereña. El periodista Florencio Bañeza fue el encargado de presentar el acto, a petición del propio orfeón. Antes de proyectar un documental sobre el histórico recorrido del grupo (que cantó la Marcha Real a la llegada de Alfonso XIII a Cáceres en 1928 y actuó en la Expo de Sevilla de 1929), Bañeza destacaba que "la música es la lengua madre para el entendimiento universal. Aquí celebramos hoy un canto coral que compartimos con orgullo cacereñista". El acto sirvió para poner de manifiesto la historia de este grupo, nacido allá por el año 1903 (un 13 de diciembre), y hacer un recorrido por su historia. 

En 2018, después de haber recibido ya la Medalla de Extremadura, salió a la luz un documento que revelaba que el Orfeón Cacereño no surgió en 1964, como siempre se había pensado; sino que se formó en 1903, y su primer concierto tuvo lugar en diciembre de ese año en el Teatro Principal (hoy desaparecido, en la calle Peñas).

El presidente del orfeón, Juan Carlos Bravo, ha agradecido emocionado el gesto, por su "dedicación", y Mateos ha preguntado al público: "¿Tenemos argumentos para ser capital europea de la cultura? Yo creo que sí. Estoy convencido. Y actos como el de hoy, vienen a reforzar esta idea. La cultura es emoción. La música nos permite viajar con los ojos cerrados. La cultura es desarrollo económico, es riqueza". 

Antes de proyectar un breve documental sobre el histórico recorrido del grupo, Bañeza ha asegurado que “la música es la lengua madre para el entendimiento universal. Aquí celebramos hoy un canto coral que compartimos con orgullo cacereñista”.

El acto ha servido para poner de manifiesto la historia de este grupo, nacido allá por el año 1903 (un 13 de diciembre), y hacer un recorrido por sus componentes, directores, presidentes, honores y distinciones; incluida la Medalla de Extremadura por el Gobierno Regional y hasta desembocar en la máxima distinción de la ciudad que le vio nacer: la Medalla de Cáceres. 

Bravo, ha agradecido el apoyo del ayuntamiento “por concedernos la Medalla; fue una sorpresa increíble cuando recibí la llamada del alcalde Mateos, y es un motivo de orgullo”. El Orfeón Cacereño está compuesto por unos 35 miembros más su directora, María del Castillo Ventosa, “que lleva con nosotros desde 2002”. Varias mujeres son las que se han puesto al frente de este grupo centenario, como Trinidad León, que fue directora del Orfeón Cacereño durante 25 años y profesora de música del conservatorio y de institutos de la ciudad. 

Mateos ha destacado que la Medalla de Cáceres es un "símbolo de los valores que tenemos los cacereños y en este caso, especialmente, de nuestro estrecho vínculo con la cultura".

Centenario

En 2018, después de haber recibido ya la Medalla de Extremadura, salió a la luz un documento que revelaba que el Orfeón Cacereño no surgió en 1964, como siempre se había pensado; sino que se formó en 1903, y su primer concierto tuvo lugar en diciembre de ese año en el Teatro Principal (hoy desaparecido, y que se ubicaba en la calle Peñas).

Según el documento (un hallazgo del propio Bravo y del cronista oficial de la ciudad, Antonio Jiménez Berrocal), un periódico local de 1927 ya hacía referencia de manera literal a que el orfeón nace en 1903 y que su constitución no estuvo exenta de polémica, puesto que “los estamentos políticos querían bautizarlo como Orfeón Republicano Cacereño. Y los avatares del destino hicieron que se pusieran de acuerdo y, al final, se quedase con el nombre actual”.

Ese documento hacía referencia al considerado «el acontecimiento del año». Así lo recogió en su momento el suplemento ‘Cáceres, su pequeña historia’, que narraba así el hecho histórico: «En las calles, en los revendujos, en los casinos, en las tabernas, se alternan varios temas de actualidad (...) se habla de un memorial a Alfonso XIII (...) se revive el crimen del Pincerelo (...) pero, sobre todo, se habla del debut del Orfeón Cacereño. Cáceres, al fin, va a contar con una masa coral y es este un acontecimiento del que nadie se siente al margen».

Ya en 1904 llegaron los primeros conciertos en las ferias de San Fernando, en Cánovas... Pero en 1907 se anunció su disolución por desavenencias internas. Volvería a resurgir en 1927 con un primer concierto en el Santuario de la Montaña y tendría una etapa muy prolífica hasta que la Guerra Civil le hizo languidecer. La Guerra Civil española les llevó a  afrontar un nuevo paréntesis y su tercer resurgir tras la contienda, en plena posguerra.

Al recoger la Medalla, Bravo ha glosado aquella fecha histórica que dio a luz al Orfeón, que fue un éxito y donde incluso se leyó un poema que Gabriel y Galán había escrito para la polifónica, tras verle ensayar dos meses antes: «He sentido en vuestro canto todo el alma del encanto del dorado amanecer...».

Hitos

Entre sus hitos destacan: cantó la Marcha Real a la llegada de Alfonso XIII a Cáceres en 1928, actuó en la Expo de Sevilla de 1929 participó en el festival de las Fiestas de la República y fue invitado al homenaje al jefe provincial de Falange, Capitán Luna. 

“El orfeón ha recorrido de punta a punta nuestra piel de toro llevando el nombre de Cáceres por todo el país”, ha manifestado orgulloso Bravo, quien ha recordado la cantidad de viajes que ha realizado el grupo. Con mención especial a la participación en la ‘Europeade Fur Folclore’ de Viena, en 1983.

Según Bravo, el Orfeón Cacereño, desde sus inicios ha paseado el nombre de Extremadura y de Cáceres por todos los rincones del mundo y de España (han actuado en Israel, Austria, París o Roma). Su repertorio es tan extenso como su pasaporte: desde canciones medievales a temas hispanoamericanos (habaneras, peruanas, chilenas, etc.) hasta fragmentos de varias óperas, como el clásico Carmina Burana. También canciones tradicionales extremeñas como El Redoble y la jota de Guadalupe. Así, desgrana un rosario de temas populares que hacen las delicias del público que suele abarrotar los espacios donde actúan.

Bravo se ha emocionado al leer las últimas palabras de su discurso y con la voz entrecortada ha aseverado que su tarea “la he llevado a cabo con todo mi cariño y dedicación”. Bañeza le ha tomado el relevo para presentar a la Consejera de Cultura, Turismo y Deporte, Victoria Bazaga, quien ha manifestado su condición de “cacereña a la hora de celebrar la resistencia de esos 120 años de vida. Tengo recuerdos desde pequeña con mi familia junto a vosotros”. Pero no pensemos en el pasado sino en el futuro para que luchar porque no se nos caiga nada alcalde yo sé que lo vas a hacer bien. Y esta medalla con vuestro palmarés nos llega al corazón”.

Antes de finalizar la entrega se han interpretado varios temas (con el maestro José Luis Porras al piano): ‘Nocturno de la ventana’ contenido en la colección Poemas del alma de García Lorca y el ‘Va pensiero’ de de la ópera de Verdi Nabucco; para terminar con una sorpresa: el ya himno oficial de Cáceres, El Redoble.