Las estrictas medidas de seguridad que imperan en EEUU desde el 11-S han acabado pasando factura al príncipe Carlos Felipe de Suecia (foto). El hijo de los reyes Carlos Gustavo y Silvia fue detenido durante 24 horas el pasado septiembre cuando, procedente de Caracas, fue confundido con un impostor en el aeropuerto de Miami, según publica ¡Hola!

El príncipe, de 27 años, formaba parte de un equipo que viajaba para rodar un documental. Cuando llegó al control de pasaportes fue sometido a un cuestionario rutinario, en el que contó que era miembro de la realeza europea. El personal de la aduana creyó que era un impostor. El joven pasó una noche arrestado y fue liberado cuando la policía verificó su identidad.