Dentro de la Zona de Especial Conservación de Orellana se recomienda realizar una serie de rutas para conocerla en su totalidad y disfrutar de sus bellos parajes.

CANAL DE LAS DEHESAS

Longitud total: 15 km.

Se recomienda iniciar la ruta desde el camping Talarrubias, en las inmediaciones de Puerto Peña. Una carretera asfaltada nos conduce, siguiendo el canal de las Dehesas a lo largo de la cola del embalse, atravesando las zonas de dehesas mejor conservadas y permitiendo disponer de vistas al río, donde es posible observar numerosas especies de aves con la ayuda de telescopios o prismáticos. Cerca de Casas de Don Pedro, en la dehesa boyal, existe una contrapresa que remansa el agua en un pequeño ancón, donde suelen verse numerosas especies de anátidas e, incluso, la cigüeña negra.

PASTIZALES Y CULTIVOS DE LA SERENA

Longitud total: 25 km.

Partiendo desde Orellana la Vieja, tomamos el desvío hacia Puebla de Alcocer (EX103), atravesando una amplia franja de pastizales que quedan limitados por el embalse de Orellana al norte y los embalses del Zújar y de la Serena al sur. Desde el coche, apartándonos en las entradas de caminos es posible observar las especies estepáricas típicas de la zona.

CONVENTO DE SAN FRANCISCO

En las afueras de Puebla de Alcocer, junto a la carretera, se encuentran las ruinas de un antiguo convento en el que se ha instalado una gran colonia de cernícalo primilla, de las mayores conocidas, siendo fácil observar estos pequeños halcones, así como a las cigüeñas blancas, grajillas y vencejos, que también anidan en el edificio.

PUENTE DE COGOLLUDO

Longitud total: 8-10 km.

Puede accederse hasta este precioso enclave desde la carretera que une Orellana de la Sierra con Navalvillar de Pela o desde Puebla de Alcocer. Aquí se encuentran las ruinas de la villa romana de Lacimurga. En el entorno del puente de Cogolludo, puede verse cigüeña negra, águila perdicera, búho real, cernícalo vulgar, alimoche y aves acuáticas como garza real, gaviota reidora y somormujo lavanco.

MIRADOR DE PUERTO PEÑA

Antes de llegar a la Presa de García de Sola, en la N-430, se halla este escondido mirador, justo en la curva final. Desde aquí se contemplan uno de los roquedos más espectaculares de Extremadura, en el que se observan más de 30 parejas de buitre leonado, alimoche, cigüeña negra, águila real, águila perdicera, halcón peregrino, chova piquirroja y milano negro, todas nidificando juntas. Con prismáticos es fácil su observación, siendo uno de los lugares más atractivos de espacios protegidos.