La Audiencia Nacional comenzó ayer a juzgar al cantante José Ramón Márquez, Ramoncín, y a tres exdirectivos de la Sociedad General de Autores (SGAE) por urdir una trama de emisión de facturas falsas con la que sustrajeron 57.402 euros a esa entidad. Ramoncín, que formó parte de la junta directiva de la SGAE entre 1998 y 2007, se enfrenta a una petición de la Fiscalía Anticorrupción de 4 años y 10 meses de cárcel (2 años y 10 meses por apropiación indebida y 2 años más por falsedad documental), así como a una multa de 13.924 euros por delito societario.

En el juicio, el fiscal José Miguel Alonso pide la misma pena para el exdirector general de la SDAE -filial digital de la SGAE- y presunto cabecilla de esta trama, José Luis Rodríguez Neri. Para los otros dos acusados, la fiscalía solicita dos años y nueve meses de cárcel para el exsecretario general de la SGAE Pablo Antonio Hernández Arroyo, y dos años para el exdirector general de la entidad Enrique Loras, así como multas de 40.356 y de 20.886 euros, respectivamente, por administración fraudulenta.

En concepto de responsabilidad civil, el fiscal reclama que Ramoncín indemnice a la SGAE con 50.912 euros, una cantidad de la que responderá solidariamente Neri hasta la cuantía de 43.950 euros.

En su escrito de acusación, el fiscal relata cómo Ramoncín y Neri, "con el exclusivo objetivo de procurarse un lucro ilícito", elaboraron documentos de apariencia legal para sustraer fondos de la SGAE mediante cinco operaciones, con las que obtuvieron 57.402 euros. Todo ello, añade la fiscalía, al margen de los 121.159 euros que debía el cantante a la entidad en concepto de anticipos a cuenta de los derechos de autor. La primera fue una factura de 10.100 euros.