Estreno en Prime Video

'The Continental': el universo 'John Wick' se expande a las series

El guionista Derek Kolstad y el director Chad Stahelski venían demostrando interés por hacer alguna precuela en televisión desde enero de 2017, cuando promocionaban 'John Wick: Pacto de sangre', segunda película de la saga

The Continental.

The Continental. / PRIME VIDEO

Juan Manuel Freire

No se veía venir: una pequeña película de acción que, curiosamente, aquí ni siquiera se vio en cines, convertida en franquicia de varios tentáculos, el último de ellos televisivo, o mejor dicho, serializado. Es el siempre curioso caso de 'John Wick', cuya insensata mitología se explora en profundidad en la precuela 'The Continental' (Prime Video, desde el viernes, día 22), historia en tres largos episodios de cómo se hizo Winston Scott (Ian McShane en las películas y Colin Woodell en la serie) con el control de la sucursal neoyorquina del Continental, esa cadena de hoteles que funciona como territorio neutral para los miembros del mundo criminal. 

En 1975, Winston ejerce como avieso hombre de negocios y seductor nato en Londres. Al otro lado del charco, en Nueva York, su hermano mayor Frankie (Ben Robson), sacudido tras combatir en Vietnam, ha aprovechado el caos de una bacanal de Nochevieja para extraer del Continental un valioso artefacto. Con ello ha enfurecido al gánster al frente del lugar, Cormac (Mel Gibson forzando acento neoyorquino), que envía a secuestrar a Winston para tratar de encontrar a Frankie y apaciguar la posible ira de sus superiores. Dos décadas atrás, Cormac había sido una especie de perverso mentor de los hermanos, la más inapropiada figura paterna. 

'No Keanu, no fun'

Winston no es el único personaje que resultará familiar para los fans de la saga. Corresponde a Ayomide Adegun el desafío de hacer olvidar al Charon de Lance Reddick. Pero muchos otros jugadores de la trama han sido creados para la ocasión: véanse la detective de policía KD (Mishel Prada, de 'Vida'), que se adentra en el Continental a pesar de las advertencias de su superior y amante (casado) Mayhew (Jeremy Bobb), o los hermanos expertos en artes marciales Lou (Jessica Allain) y Miles (Hubert Point-Du Jour), enredados como la feroz luchadora Yen (Nhung Kate), esposa de Frankie, en el intento de Winston de tomar el mando del hotel. Cormac aparte, los villanos clave de la historia son Hansel y Gretel, dos supuestos gemelos con el físico intrigante del especialista Mark Musashi y la contorsionista Marina Mazepa

La presencia más importante ha de ser, sin embargo, el vacío (de carisma) dejado por Keanu Reeves, sin quien no se debería hacer nada que rimara con 'John Wick'. Ese Reeves amante de los perros es el único y verdadero mito de una mitología que ya se ha explorado, expandido y explotado casi en exceso en las últimas entregas cinematográficas. 

En construcción desde 2017

El guionista Derek Kolstad y el director Chad Stahelski venían demostrando interés por hacer alguna precuela en televisión desde enero de 2017, cuando promocionaban 'John Wick: Pacto de sangre', segunda película de la saga. Pero pasó un largo tiempo hasta que se eligió a los creadores, tres veteranos de 'Wayne', y el director principal, Albert Hughes, curtido en la violencia cinematográfica del brazo de su hermano Allen en títulos como 'Infierno en Los Ángeles' y 'Dinero para quemar'. 

Sin llegar al virtuosismo coreográfico de las entregas fílmicas, 'The Continental' ofrece sus buenos momentos de acción, intensos fogonazos de gun-fu (esa mezcla de la musicalidad del kung-fu con la iconografía del cine de gánsters) en los que puede verse quién pega o dispara a quién. En el favorito de este cronista, Yen se desembaraza del enemigo apoyándose en el mobiliario de la cocina y haciendo uso insólito de una plancha: quizá la mejor pelea doméstica desde aquella de la serie 'Alias' que probablemente inspiró aquella de 'Kill Bill: Volumen 1'

A pesar de lo obvio de algunas elecciones, Tarantino aprobaría una selección de canciones que ocasionalmente ayuda a despertar del letargo de discursos llenos de matices inútiles. Bien por abrir con 'Hard times', del gran cantante soul Baby Huey, aunque ya se usó para acompañar a Van Damme en la apertura de 'JCVD'. Y por el 'Without you' de Nilsson, aunque Scorsese ya la usó como contrapunto bellísimo de la violencia en 'Casino'. Y por todas esas canciones perfectas de gente tan diversa como Wire, James Brown o nuestras Baccara.