El Tour de Francia de 2004 presenta un recorrido con menos kilómetros de lucha contra el crono y más dureza en las etapas, tanto en las cronometradas como en las de montaña, una fórmula que dificultará al estadounidense Lance Armstrong convertirse en el primer ciclista en sumar seis triunfos.

La gran novedad del recorrido será la cronoescalada de Alpe d´Huez, cinco días antes de llegar a la meta, una etapa que los analistas coinciden en señalar que puede perjudicar al quíntuple campeón.

Además, la otra etapa contra el crono, de 65 kilómetros en la penúltima jornada en Besancon, no presenta un recorrido plano, sino un perfil mixto en el que el alemán Jan Ullrich se desenvuelve con mayor soltura, como ya demostró en la pasada edición.

CAMBIOS REGLAMENTARIOS

Por si fuera poco, el Tour presentará una reforma reglamentaria que limitará a dos minutos y medio las diferencias en la etapa de contrarreloj por equipos, una disciplina que el US Postal de Armstrong suele disputar bien.

Los organizadores de la ronda gala se han asegurado, al menos, que el ganador del Tour no será conocido hasta el final, ya que, en un ejercicio de originalidad, han concentrado los momentos fuertes en la última semana.

Los 3.400 kilómetros recorridos, las siete etapas de montaña, los 21 puertos, las tres llegadas en alto y los 150 kilómetros contra el crono no son una gran novedad, pero sí la forma en que han sido dispuestos.

La lógica invita a pensar que el Tour de 2004 volverá a ser un duelo entre Armstrong y Ullrich, al que todos consideran el único rival que puede arrebatar el triunfo al estadounidense, como ya demostró en la edición de este año.

Si el germano sigue su progresión y el alemán muestra algún síntoma de decadencia, el Tour de 2004 podría marcar el fin de la era de Armstrong y mantener a salvo la marca de cinco victorias en París.