La selección brasileña espera neutralizar el riesgo goleador que genera el marfileño Didier Drogba, elevar la cotización de la acciones de Kaká y alcanzar un triunfo convincente que de paso anticipe la clasificación para los octavos de final (20.30 horas, Cuatro). La presencia o no de Drogba desde el primer minuto del encuentro se ha convertido en una prueba de adivinanza promovida por el seleccionador de Costa de Marfil.