El jugador extremeño de la NBA José Manuel Calderón tuvo un día de sabor agridulce. Por un lado, lamentó la muerte del que fue su entrenador en el entonces Tau Vitoria y de otro fue nombrado doctor honoris causa por la Universidad de Extremadura, según la resolución aprobada ayer por mayoría absoluta por su consejo de gobierno. En lo negativo, Calderón asumió estar "sin palabras" y recordó que 'El Sheriff, como se conocía a Manel Comas, siempre se portó "muy bien" con él. "Mi recuerdo y mi cariño a uno de los grandes del baloncesto español", concluyó. En el lado positivo, el base de Villanueva de la Serena posee, además del Príncipe de Asturias, la Medalla de Extremadura y en su elección pesó mucho su labor social, según explicó a Efe el decano de la Facultad de Ciencias del Deporte, Guillermo Olcina, encargado de hacer la propuesta.