Con apenas 23 años, Adri Escudero es ya todo un veterano en las lides defensivas. Contundencia, carácter, anticipación y personalidad. Esas son las principales características de este central del Villanovense, que juega con la ambición de quien tiene todo por lograr en el mundo del fútbol y con una jerarquía impropia para su edad. 

En su tercera temporada enfundándose la elástica serona, Escudero ha vuelto a afianzarse en el once titular. A su llegada al club hace tres campañas tuvo que ganarse la confianza de Pepe Masegosa, al que luego le siguió Javier Álvarez de los Mozos. Con ambos gozó de oportunidades, sobre todo con el burgalés, que logró sacar de él su mejor nivel. No en vano, fueron numerosos los equipos de superior categoría que el verano pasado tocaron a su puerta, pero el Villanovense era su sitio.

Ahora, con Juanma Pavón en el banquillo, ha tenido que trabajar duro para lograr que el onubense apostase por él. «Yo confío en mis posibilidades porque siempre trabajo para ganarme la confianza del entrenador y parece que la he encontrado», reconoce. Y eso que en las últimas jornadas ha actuado de lateral izquierdo. «Me estoy encontrando cómodo, mucho mejor de lo que esperaba», confiesa. 

Una nueva demarcación en la que ya había actuado con anterioridad, cuando militó en las filas del Valdivia. Y a la vista están los resultados. Desde que Adri Escudero agarró la titularidad, el Villanovense solo ha encajado dos goles en cuatro partidos Los dos ante el Deportivo Don Benito en el derbi. Precisamente la derrota ante el conjunto calabazón cree que supuso un importante toque de atención. Desde entonces, seis puntos de seis posibles. La última victoria, el pasado fin de semana en casa ante el San Fernando, fue clave. «Nos hacía falta ganar en casa porque el último partido, ante el Don Benito, no se nos dio bien y la afición merecía disfrutar con un triunfo del equipo», señala. 

‘Playoff’, el objetivo del Villanovense

Y es que el Villanovense es cuarto clasificado y ocupa zona de playoff, una posición que según el central de Ruecas su equipo debería oscilar durante toda la temporada. «Nuestro objetivo debe ser el de pelear por mantener la posición que tenemos ahora en la tabla; tenemos una gran plantilla y queremos jugar playoff», confiesa el joven jugador. No obstante, recuerda: «Lo primero es lograr la salvación». De momento van por buen camino, pero este domingo deberán dar un nuevo paso hacia su objetivo en la isla de La Palma ante el Mensajero. Y es que a este chico ni la fuerza del volcán le asusta. «Vamos a Canarias con la única idea de traernos los tres puntos, lo demás no lo podemos controlar». Así es Adri Escudero, uno de los mejores centrales de la categoría en plena ebullición que solo entiende de dar el máximo por su equipo.