Para el lanzador de martillo Javier Cienfuegos Pinilla (Montijo, 15 de julio de 1990) ganar un título nacional como el del pasado fin de semana en Motril es algo que le llena de orgullo, pero tampoco le obsesiona. Ahí sigue el atleta extremeño engordando su palmarés repleto de oros, de felicidades y de sonrisas competitivas. Pero Cienfuegos es mucho más que eso: es un diputado autonómico del PP fiel a su partido y a sus creencias que se disgusta cuando los equipos de fútbol de su tierra están al borde de la desaparición o, en el lado positivo, pelean en la parte alta de la Segunda RFEF, como ocurre con el Montijo de su alma.

En esta entrevista, el deportista y político extremeño repasa su carrera deportiva, asegurando que puede alargarse como mínimo hasta los Juegos de París del 2024, pero no cierra la puerta a continuar hasta Los Ángeles 2028. También es agradecido con José Antonio Monago, «que es quien confió en mí», pero siempre con un lema por delante: «el deporte siempre será mi prioridad».

11 títulos nacionales de invierno de 12 posibles. ¿Hasta cuándo seguirá este dominio?

--No lo sé. Mínimo este año. Mi intención es seguir compitiendo hasta los Juegos de París. Después Dios dirá. Voy a seguir trabajando en la misma línea. Pedro (José Martín) y Alberto (González) están ahí apretando y a mí esto me sirve para no relajarme.

--¿Cuál es su real motivación? ¿Ganar siempre es aburrido?

No, ni mucho menos, está claro. De hecho, cada año es diferente y nos ponemos metas nuevas, aunque sean los mismos campeonatos. No llevo la cuenta, sino que por ejemplo en la temporada de invierno queríamos hacer buenas marcas en el campeonato de Extremadura y en el campeonato de España. Esta semana tenemos el campeonato de Europa, en el que queremos luchar por las medallas. Después miraremos al verano con el Mundial y el Europeo, pero tampoco me fijo mucho más allá. Voy paso a paso y cuando sea el nacional de verano intentaremos ganarlo. Si eso es sumar el 11 o el 12 pues mejor.

¿Cuántos suma, entre invierno y verano?

He leído que 21, pero no llevo la cuenta.

Aunque fuera de España no domina como quizá quisiera, ha mejorado en sus últimos campeonatos internacionales ¿Cuál es la diferencia, en su opinión, para que esto pasara?

Todo cambió cuando Carlos Burón vino al equipo. Antonio Fuentes y él se compaginan muy bien. Después de los Juegos de Río en 2016 cambio, pero después me tengo que operar un tengo un parón. Está claro que después, cuando hemos hecho las temporadas enteras, he competido muy bien. Con tranquilidad y todo lo que rodea la planificación y el entrenamiento de Carlos y la técnica que ponemos en práctica con Antonio llegamos bien. Ahí es donde hemos dado el salto de calidad.

Ese tiro de 80 metros, ¿para cuándo?

Este año, jajaja… y si no el que viene. Estamos trabajando para volver a hacer marca. De hecho el año pasado también lanzamos por encima de los 78-79 metros entrenando y nos faltó quizá alguna competición más. Tampoco hay que fijarse en eso. Hay que seguir entrenando bien, como está pasando hasta ahora en estos meses, vemos que los platos gordos son en verano y vamos a intentar hacer ese récord de España, que está en 79.38. Nos quedan 62 centímetros entre el récord de España y los 80 metros. Voy a buscar pasar esa línea.

¿Ese es su sueño más claro después del de ser medallista olímpico?

Sí. Al final la marca la tienes que pelear, te quedas ahí…, pero la medalla en un gran campeonato no te la quita nadie. Es cierto que esos 79.38 te dan una tranquilidad enorme porque puedes decirte: ‘como mínimo valgo esto’. Los 76 que tenía sabía que no eran mi potencial, ni mucho menos. Podemos pelear por todo. Este año vamos a intentar buscar esa marca, pero ya no me obsesiona de tal manera que diga que: ‘bueno, tengo que hacer más’. Esto nos puede ayudar a competir mejor. El año pasado en los Juegos acudí a los Juegos casi como el 30 en el ranking, pero estaba seguro que estaba en un nivel muy bueno y que estaba compitiendo muy bien. Sabía que de 75-76 no iba a bajar y eso me iba a ayudar. Y así fue.

¿Su carrera tiene fecha de caducidad en este momento?

Sí, claro, pero ahora mismo no lo sé. Sé que por edad en París 2024 puedo seguir compitiendo bien. Después cada año dirá. Sí es cierto que llegará un momento en el que dé un paso al lado y siga lanzando martillo porque me gusta, pero no le dedicaré todo el tiempo que se necesita para estar arriba. Si tengo que llegar a Los Ángeles 2028 perfecto, pero si no, me puedo retirar tranquilo.

¿Qué le motiva más, la política o el deporte?

El deporte. Soy lo que soy gracias al deporte. Siempre será mi prioridad.

¿Será director general de Deportes extremeño alguna vez o quizá aspira a más?

Si soy director general de Deportes alguna vez es que el PP vuelve a gobernar en la tierra y esto siempre será bueno para la democracia y para los ciudadanos. He venido a la política a trabajar y estaré aquí hasta cuando me necesiten. Si quieren, bien; si no ayudaré desde fuera. No tengo pretensión alguna más allá de lo que se me requiera.

¿Cuál es su diagnóstico del deporte extremeño?

La situación es buena. Recuerdo Londres 2012, cuando los extremeños que íbamos a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos se podían contar con los dedos de las dos manos y ahora mismo nos hacen falta. Si encima Alberto Ginés consigue esa medalla de oro, Álvaro Martín queda cuarto y otros nos metimos en finales, podemos decir que estamos en muy buena posición ahora mismo. Lo que hay que hacer ahora es no perder esa senda, seguir sumando y que los chavales jóvenes vean que desde Extremadura se puede trabajar mucho y bien. Algunos se tienen que marchar, como yo también me fui en su día, pero esto demuestra que estando dentro de nuestras fronteras se puede pelear por todo.

Como buen aficionado al fútbol, hable de lo que está ocurriendo en el Extremadura y el Badajoz y también sobre la campaña que está haciendo el club de su pueblo, el Montijo, en el que usted trabajó y que ahora está en Segunda RFEF

Sufrí mucho cuando el Badajoz no pudo subir a Segunda. También cuando el Extremadura perdió la categoría profesional porque es un escaparate estupendo para todos los jóvenes futbolistas extremeños. Ahora mismo da mucha pena por los clubs, por los trabajadores, por los aficionados… estamos perdiendo esa esencia. Pensamos que en Extremadura cuando llegamos a dar ese paso todo desaparece. Esos proyectos hay que solidificarlos mejor. Es cierto que la categoría profesional es difícil mantener, pero hay que poner la carne en el asador para que sobre todo los niños tengan un club de referencia y sus sueños no sean solo irse a jugar al Villarreal, al Betis, al Madrid o al Barcelona, sino que tengan a uno aquí en Primera o Segunda que digan: ‘pues mira, a lo mejor el día de mañana puedo jugar en el Extremadura o el Badajoz y no me tengo que ir a la otra punta de España’. Por otra parte, con el respecto a lo del Montijo estar ilusionado es poco. En el primer partido, cuando empatamos con Las Palmas Atlético, nos dimos cuenta que este equipo podía pelear los partidos. La segunda vuelta ha empezado muy bien y venimos de empatar con el Ceuta. Yo apuesto alto siempre y creo que vamos a pelear por estar en los playoff de ascenso y ahí es más suerte que nada.

Para terminar, un minitest de su partido. ¿’ayusista’ o casadista?

Ahora mismo, del Partido Popular. Soy uno más.

¿En la comunidad extremeña, ’monaguista’, ‘pizarrista’ o ‘guardiolista’?

Tal y como estamos ahora mismo, ‘monaguista’. Yo estoy aquí por el presidente Monago, que es el que ha confiado en mí. En el Congreso del partido, cuando se convoque, ya se verá.