La Comisión Europea prevé que el crecimiento económico de España se contraiga un 0,1 % en el último trimestre del año y se mantenga estancada en el anterior, lo que abre la puerta a una posible entrada en recesión, que se produciría si se confirman dos caídas trimestrales del PIB consecutivas.

España no había registrado una contracción del crecimiento trimestral desde el cuarto trimestre de 2009, cuando el PIB retrocedió un 0,2 %, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La tasa adelantada del PIB entre julio y septiembre de este año la dará a conocer mañana el INE y la confirmará oficialmente el próximo miércoles. El deterioro de la economía española en la segunda mitad del año unido al recrudecimiento de la crisis de la deuda soberana ha obligado al Ejecutivo comunitario a revisar sus previsiones de crecimiento para el conjunto del año y para 2012 también a la baja en el caso de España.

En concreto, ha adelantado que el crecimiento del PIB español se limitará al 0,7 % tanto este año como el próximo, una décima menos de lo previsto para 2011 (0,8 %) y ocho décimas menos de lo pronosticado para 2012 (1,5 %). Según el desglose por trimestres que ofrece la Comisión, la evolución la economía española se expandirá de forma muy moderada en los primeros meses de 2012: 0,1 % de enero a marzo y 0,2 % de abril a junio, y empezará a recuperarse en la segunda mitad del año (0,3 % en el tercer trimestre y 0,4 % en el cuarto). Para 2013, Bruselas augura un crecimiento de alrededor del 1,4 % y prevé una evolución constante del 0,3 % en cada trimestre del año.

Las previsiones económicas de otoño de la CE no sólo sitúan a España a las puertas de la recesión sino que además confirman que no cumplirá su objetivo de déficit para este año (6 % del PIB) y que habrá que tomar más medidas de ajuste. El déficit español aumentará, según el cálculo de Bruselas, hasta el 6,6 % del PIB este año y el 5,9 % en 2012, por encima del 6,3 % y el 5,3 %, respectivamente, pronosticado en mayo, pero aún lejos del 9,3 % registrado en 2010. El Ejecutivo comunitario recalcó en su informe de hoy que aunque España ya está tomando medidas de consolidación a nivel central y regional, "se necesitarán incluso más medidas correctivas para lograr el objetivo de déficit este año".

Las cifras de desempleo que anticipa Bruselas no dibujan un escenario mucho más halagüeño: calcula que el paro en España se situará en el 20,9 % en 2011 y 2012, frente al 20,6 % y 20,2 % anunciado en el pronóstico de primavera de la CE. En cuanto a la inflación, la CE prevé que la tasa española caiga un poco más del 2 % hacia finales de año y se mantenga relativamente baja en 2012, de manera que se situará en el 3 % en 2011 y en el 1,1 % el próximo año. La Comisión explica en el capítulo que dedica a España en las previsiones económicas de otoño que sus cálculos para 2012 se basan en la asunción de un escenario sin cambios de política económica, debido a que aún se desconocen las medidas que adoptará el próximo Gobierno español, tras las elecciones del 20 de noviembre.