Tener una póliza de seguro siempre será necesario. En la vida real, las personas están expuestas a continuas situaciones de riesgo y enfermedades que pueden aparecer en cualquier momento. Es por este motivo que los seguros de vida o médicos son los mejores aliados.

En el mercado existen cientos de opciones por lo que es necesario saber escoger el que nos ofrece más herramientas de atención, mayor cobertura y beneficios por su adquisición.

Qué debe ofrecer un buen seguro médico

Generalmente los seguros médicos ofrecen múltiples beneficios, tienen una periodicidad anual que se puede pagar de manera mensual y hasta semestral. Los servicios en su mayoría son de laboratorio, consultas médicas, una amplia red de hospitales y clínicas y otros servicios adicionales por los que se debe preguntar, como el odontológico.

Estos seguros de salud dan cobertura mundial ante cualquier eventualidad que se pueda presentar durante un viaje familiar. La atención materno-infantil también debe estar incluida con especial énfasis en el recién nacido.

En cuanto a las personas de la tercera edad los seguros de asistencia sanitaria deben brindar acceso a la medicina general, dental y enfermería sin nuevos pagos y con terapias asistidas, rehabilitaciones cardíacas y tratamientos psicológicos.

Habitualmente las compañías de seguros médicos exigen al asegurado que se someta a un examen médico previo para verificar su estado de salud antes de establecer el contrato.

¿Los seguros médicos cubren todo?

La mayoría de los seguros médicos siempre tienen un vacío legal en cuanto a cobertura de servicios, esencialmente en la realización de estudios médicos especializados o en gastos relacionados con los tratamientos médicos a seguir, y dentro de este grupo, existen solo unas pocas compañías aseguradoras que le permitan al asegurado cubrir los gastos por su cuenta para que posteriormente se inicie el proceso de reintegro para que el seguro les reembolse el dinero gastado.

Asegure su vida

El seguro de vida es ese servicio que nadie quiere contratar pero que todos deberían adquirir. Le garantiza un sustento económico a la familia o beneficiarios designados al momento de una defunción, bien sea por razones naturales, de salud o a causa de un accidente o hecho trágico.

Estas pólizas suelen tener dos alcances: el básico, que solo incluye una manutención por fallecimiento y los gastos de sepelio y testamento; y otro complementario donde además de lo primero también se pueden incluir el pago de una renta por invalidez absoluta.

Lo más común, dependiendo de la compañía que se elija, es que estos servicios se contraten a personas mayores de edad, y que no pasen de 60 años, aunque existen algunas aseguradoras que permiten incluir en estos seguros también a menores de edad.

Todos los seguros de vida deben ser válidos ante un fallecimiento por cualquier causa, ofrecer un anticipo de los gastos de sepelio, otorgar un doble capital por fallecimiento en un accidente, invalidez permanente y absoluta por cualquier causa y doble capital por fallecimiento en un accidente.

Una cláusula adicional que suelen tener es el soporte médico las 24 horas del día, repatriación del cuerpo en caso de fallecimiento fuera del país natal y renta por enfermedad clínica.

¿Cómo se pueden contratar estos servicios?

Hay dos opciones para poder contratar estos seguros, la primera es contactar a un corredor, que se encargue de hacer las requisiciones de acuerdo a lo que pida la persona, y la otra es dirigirse a las oficinas de las aseguradoras de su localidad y solicitar asesoría directa a los promotores para elegir por sí mismo el plan médico y de vida que mejor le convenga.

Los precios de los seguros pueden variar de acuerdo con los servicios que se requieran para cada seguro y los alcances que tenga la póliza escogida. Existen portales web donde fácilmente se pueden comprar los productos que ofrecen cada uno de los seguros en el mercado, ya que cuentan con toda la información y precios detallados.

Términos que se deben conocer al momento de contratar un seguro

  • Póliza: Es el documento donde se incluirán los derechos y obligaciones de ambas partes. Se mostrarán los datos personales del asegurado, de la compañía, la cantidad a pagar y cada cuanto se realizarán los pagos.
  • Asegurador: Entidad aseguradora que se hace cargo la cobertura del riesgo del asegurado.
  • Tomador: Persona que contrata el contrato de seguro. Normalmente suele ser el asegurado, pero podría suceder que el seguro lo pague una tercera persona y el seguro sea para un familiar.
  • Asegurado: La persona que tiene la cobertura y, por tanto, quien está expuesta al riesgo.
  • Beneficiario: Es la persona a la que se indemnizará en caso de que se den las condiciones previstas en la póliza contratada. Por supuesto, puede ser la misma persona.