El único prototipo español del avión de combate europeo Eurofighter se estrelló ayer en la provincia de Toledo cuando realizaba un vuelo de pruebas. El accidente, según informó el Ministerio de Defensa, se produjo por la parada simultánea de los dos motores. Los dos pilotos lograron saltar en paracaídas y resultaron ilesos.

En el momento de la avería, el aparato volaba a una altura de 15.000 metros. Los dos pilotos, el teniente coronel Eduardo Cuadrado y el comandante Ignacio Lombo, intentaron volver a encender los motores pero, al no lograrlo, usaron el sistema de ejección de la cabina para saltar del avión. El prototipo, que había salido de Getafe (Madrid), se estrelló cerca de Belvís de la Jara sin causar daños ni a personas ni a propiedades, según Defensa.

El ministro de Defensa, Federico Trillo, ha encargado al jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, general Eduardo González-Gallarza, un informe sobre las causas del accidente, aunque precisó que la investigación técnica dependerá de EADS, el consorcio fabricante del avión.

PRIMER APARATO, EN MARZO

El Ejército tiene previsto recibir en marzo el primero de los 87 Eurofighter que adquirirá dentro del programa de construcción de este avión de combate. El coste para España de la producción del programa --que concluirá en el 2023-- es de 8.305,7 millones de euros (1,38 billones de pesetas).