Greenpeace ha organizado en la plaza madrileña de Callao una simulación de boda entre políticos y compañías eléctricas para denunciar "la connivencia de intereses y el freno a las energías renovables".

La simulación de boda múltiple se ha centrado en un enlace entre el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

Con esta boda ficticia Greenpeace ha querido hacer visible el apoyo de ambos a las energías sucias y "su relación de amor e interés por el dinero", tal y como han declarado a EFEverde los imitadores de ambos presidentes.

En una entrevista con EFEverde, el responsable del área de investigación e incidencia de Greenpeace, José Luis García Ortega, ha afirmado que "Iberdrola está poniendo freno a las energías renovables, especialmente donde no tiene participación como la energía solar, y el Gobierno obedece".

Ortega ha exigido que "se modifique la ley de incompatibilidades para que no se permita que los que han sido altos cargos públicos puedan ocupar puestos en las compañías eléctricas y viceversa".

Greenpeace ha colgado una pancarta en un edificio de la Gran Vía en el que se leía: "El Medioambiente paga la boda" y ha repartido una imitación de factura de la luz en la que denuncia que Iberdrola "durante el periodo 2005-2012 solo produjo 14,99 % de energías limpias, mientras que generó 40,34 % de gas y 19,23 % de nuclear".

El enlace ha estado marcado por gestos como estrechamiento de manos, besos entre imitadores de políticos y empresarios y por los ataques al Gobierno: "Me caso contigo Rajoy por los 2.840 millones que gana Iberdrola cada año", ha subrayado el imitador de Galán.

La boda múltiple también ha celebrado el "matrimonio" entre el presidente de Endesa, Borja Prado, y José María Aznar, asesor de esta compañía y el presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró, y Felipe González, consejero de esta compañía.