El 2004 no fue un mal año en materia de seguridad en la Central Nuclear de Almaraz (CNA). Al menos así se desprende del último informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que recientemente fue remitido al Congreso de los Diputados.

En este sentido, sólo se notificaron 2 paradas no programadas, ambas en el reactor número dos, y un incidente calificado como de nivel 1 por el CSN. Esta es la cifra de fallos de seguridad más baja al menos desde el año 2000, aunque, en el lado negativo, es la primera vez en los últimos tiempos que se notifica un problema de nivel 1. Según la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (Ines) se trata de una "anomalía", es decir, el nivel más bajo dentro de los llamados incidentes .

Es, señala el CSN, "una anomalía que rebase el régimen de explotación autorizado". El problema se debió, según el informe del CSN, a un fallo de calibración en unas piezas fabricadas por la empresa Rosemount que, pese a todo, "no provocó daños al personal ni a la planta, siendo nula la indisponibilidad energética provocada por el mismo".

Operatividad

Por lo que se refiere al funcionamiento de la central extremeña, el documento explica que los dos reactores operaron al 100% prácticamente todo el año. De hecho la central de Almaraz alcanzó el año pasado una producción acumulada de 300.000 millones de kilowatios/hora, "un registro nunca alcanzado por ninguna otra instalación de generación eléctrica española", según explican los responsables de la instalación extremeña.

Por otra parte, a lo largo del 2004 se llevaron a cabo 31 inspecciones a la central, sin que de ellas se derivasen posteriormente sanciones ni apercibimientos.

Con todo, los responsables de Almaraz concluyen que el 2004 destacó por "el buen funcionamiento y la alta disponibilidad" tanto de esta central como de la de Trillo, ya que hay que recordar que ambas mantienen una gestión conjunta que se formalizó el año pasado desde el punto administrativo. También resaltan, en relación con el cumplimiento del Protocolo de Kioto, que el funcionamiento de las dos centrales "evitó la emisión a la atmósfera de 25 millones de toneladas de CO2 que se hubieran producido si se hubiera generado la misma energía eléctrica con combustibles fósiles".

En el caso concreto de Almaraz indican en un documento de conclusiones que "los resultados se pueden calificar de muy satisfactorios al superarse los mejores objetivos previstos para la totalidad de los parámetros".

Otro hito fue la decimoquinta recarga de combustible del segundo reactor, en la que durante 26 días se desarrollaron 6.912 actividades.