La región echa un cable a la ciencia
España y Portugal desarrollan una red científica de superordenadores. Badajoz es uno de los puntos claves para la conexión por fibra óptica.
Extremadura jugará un importante papel en la futura red ibérica de supercomputadores que se proyecta entre España y Portugal. Estos dos países están comprometidos con el desarrollo de la tecnología y la ciencia que posibilite dotar a los científicos hispano-lusos de una infraestructura que les permita ampliar su colaboración en tareas de investigación. Para ello, los dos países han previsto dos conexiones por fibra óptica, una que empezará a desarrollarse en dos meses a partir de Valena do Minho y Tui, y otra entre Badajoz y Gálvez.
La red Grid de España y Portugal, así se denomina, será una infraestructura para la investigación y el desarrollo similar a la que ya existe en otros países --Estados Unidos, China o Japón--. Permitirá el acceso a información de forma más fácil para los investigadores y ofrecerá grandes posibilidades de cálculo. Así lo anunció ayer Andrés Gómez, responsable de Proyectos del Centro de Supercomputación CESGA, en el marco de la I Conferencia Ibérica Ibergrid, que se desarrolla en Galicia.
La computación distribuida o Grid, según recoge Europa Press, está diseñada para resolver problemas demasiado grandes para cualquier supercomputadora, es una infraestructura que permite la integración y el uso colectivo de ordenadores de alto rendimiento, redes y bases de datos que son propiedad y están administrados por diferentes instituciones.
Así, Ibergrid será la marca que simbolice una cooperación amplia y abierta entre España y Portugal en materia de e-Ciencia, así como una alianza estratégica para defender en común los intereses de ambos países en la Unión Europea, particularmente, los relacionados con la cooperación con Latinoamérica, el área Mediterránea y Africa Central.
Su uso se extenderá
Ibergrid estará al servicio de la comunidad científica de España y de Portugal, pero podrá extenderse de forma que en el futuro podrá utilizarse para el control de riesgos ambientales y de catástrofes, en el cambio climático y en otros ámbitos, según indicaron los responsables de ambos países.
Por otra parte, el elevado grado de especialización y la relevancia internacional del Plan Ibergrid ha despertado el interés de empresas punteras en el sector tecnológico como Bull, Dell, Fujitsu Siemens, Sun Microsystems, Intel, HP Invent o Telindus.