La Confederación de Sindicatos de Cajas y Afines (CSICA) acusa a la dirección de Liberbank de ser la responsable de la situación que ha llevado a la entidad a tener que acometer los ajustes impuestos por Bruselas y alerta sobre posibles futuros planes que incluirán despidos.

"Tememos que, en un breve periodo de tiempo, Liberbank nos pueda presentar otro ERE para extinguir contratos de trabajo, con medidas traumáticas para los empleados afectados", afirma el sindicato.

CSICA carga contra la dirección de Liberbank, entidad financiera fruto de la fusión de Cajastur/Banco CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura, por ceder a Sareb, el 'banco malo', una "multimillonaria cartera" de créditos "a cambio de una propina".

Asimismo, la responsabiliza de "la nefasta expansión" territorial realizada fuera de las regiones de influencia de las antiguas cajas, estrategia que a su juicio ha llevado a tener que cerrar 160 oficinas en 2011 y 86 este año.

Para el sindicato, los trabajadores están "pagando el pato" de una mala gestión.

Liberbank presentó en octubre de 2012 un plan de recorte del 25 % de salarios y gastos. La última reunión para abordarlo, celebrada el pasado 4 de abril, concluyó con el rechazo de los sindicatos a la propuesta de la entidad.

CSICA pide a la dirección que retire el plan inicial y presente uno nuevo que con medidas no traumáticas.