El sindicato UGT de Extremadura ha considerado positivo el descenso del desempleo en febrero en 2.666 personas en Extremadura, aunque lo vincula en gran parte a contrataciones públicas de carácter esporádico.

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El sindicato advierte de que esta rebaja no puede relacionarse directamente con la reactivación económica "ni mucho menos con la mejora de la calidad del empleo", señala.

Según el sindicato, el 95,7 por ciento de los contratos registrados en febrero son temporales, cerca del 23 por ciento son a tiempo parcial y, al menos, un 35 por ciento no alcanza los quince días de duración.

Por ello, exige el refuerzo de políticas activas de empleo y de intermediación, "en vez de la vana presentación de medidas estrella que no tienen recorrido en lo que queda de legislatura en Extremadura, con cuatro años perdidos en términos de paro y en los que se ha generalizado el empleo basura".

Para UGT, el descenso del paro es un dato favorable que se une a un repunte de 3.952 afiliaciones a la Seguridad Social, aunque reseña que pese a que en febrero había 12.114 demandantes de empleo menos que un año antes, prosigue la retirada de personas que quieren trabajar.

UGT destaca la rebaja del paro en la construcción con 618 parados menos, que entiende relacionado con obra pública y programas municipales de contratación.

También señala que se ahonda en la feminización del paro ya que con un total de 77.084 el desempleo femenino gana peso de forma creciente.

En cuanto al número total de contratos registrados en el mes de febrero, se sitúa en 39.598, que si se comparas con los registrados en el mismo mes del año anterior, se incrementan un 29,24%, aunque no se amplía su calidad.

También señala que la tasa de cobertura continúa en descenso y, en este contexto, critica la nueva rebaja de las cotizaciones sociales a los contratos fijos porque su ineficacia histórica para generar empleo es manifiesta.

A su juicio, esto puede provocar una nueva devaluación salarial, incluso potenciar el efecto sustitución, por ello en lugar de seguir subvencionando al sector privado, mediante bonificaciones a la contratación, cree que es preciso reforzar los recursos de los Servicios Públicos de Empleo, para que mejoren la empleabilidad y la formación y faciliten la inserción permanente de los desempleados.