La emergencia cinegética se amplía a toda la región y por tiempo ilimitado mientras no se controle la incidencia de la tuberculosis bovina entre el ganado doméstico. Investigaciones de la Unidad de Patología Infecciosa de la Uex sitúan en especies como el jabalí y el ciervo la expansión de la enfermedad, como ya informó este diario, y la nueva orden de emergencia cinegética plantea un marco distinto al que se había dibujado hasta ahora, cuando este tipo de resoluciones eran anuales y únicamente afectaban a determinadas zonas, municipios o cotos de la región.

La nueva no habla sin embargo en estos términos sino que se extiende a toda la región, con los límites que establece el plan de caza en cuanto a la división de en comarcas en función de las actividades predominantes de cada zona. Con caracter general, en los cotos de caza mayor, se podrán abatir jabalíes sin cupo, así como hembras de ciervo y muflón, también sin cupo. Además, junto a las acciones de caza, introduce recomendaciones en cuanto a la alimentación suplementaria que se puede usar con las especies cinegéticas para que sean más resistentes a la enfermedad.

DIFERENCIAS La resolución distingue entre las seis comarcas que tienen 'vocación' de caza mayor --esto es que es una zona en la que tradicionalmente han estado estas especies cinegéticas-- y las que no lo son porque predominan las actividades agrícolas y ganaderas, alternando con la caza menor. En estas últimas, dos tercios del total, se permite con carácter general la caza de jabalí, así como hembras de ciervo o gamo sin cupo, en las zonas abiertas de los cotos y siempre con autorización expresa o comunicación previa a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente.

En cuanto a las zonas abiertas en los cotos de las zonas de caza mayor se establecen distinciones en función de caza zona. En las zonas de Monfragüe, Villuercas-Ibores-Jara, se autoriza incrementar en un 50% el cupo de ciervas y se elimine el cupo en las de gamo; en los casos de la Sierra de San Pedro y Tajo Internacional, Salor la Siberia, Trasierra y Tendudía, se incrementa en un 20% y se elimina el cupo en los casos de la de gamo.

La resolución se remite a los datos del Plan de Caza que reflejan "un incremento general en Extremadura en las poblaciones de ciervo y jabalí" y una expansión "anómala" de ambas especies "fuera de áreas que habían constituido su hábitat tradicional". Une a esto que "se ha producido un considerable aumento de la prevalencia de la tuberculosis bovina" tanto en la fauna silvestre como en la doméstica, y los estudios de la Unidad de Patología Infecciosa de la Uex "constatan" la relación con las especies cinegéticas.

En esta línea, la resolución no solo fija acciones cinegéticas sino que también establece recomendaciones en el caso de que se recurra a la alimentación suplementaria de estas especies. Establece límites para la ubicación de sus comederos, que deberán estar al menos a 500 metros de las zonas de ganado y recomienda que se utilicen alimentos y piensos ricos en calcio "esencial para aislar las lesiones provocadas por la tuberculosis", dice.

CALENDARIO DE CAZA Por otro lado, ayer se publicó también la orden de vedas, que fija el inicio de la temporada con caracter general en el 8 de octubre, con el inicio del periodo hábil para las principales modalidades de caza mayor. La caza menor se inicia cuatro días después, 12 de octubre, y la media veda tendrá inicio el 20 de agosto. La orden que regula los periodos de caza e incluye las especificaciones para cada modalidad y especie se publicó ayer en el DOE. La media veda se permite desde el 20 de agosto hasta el 11 de septiembre, sábados, domingos y festivos de carácter nacional o regional.

En el sector cinegético valoran ayer de forma positiva ambos textos. La Federación de Caza mantuvo ayer una reunión con servicios técnicos de Medio Ambiente para abordar el nuevo marco y solo trascendió que la valoración que hacen de la misma es positiva. También valoran este marco regulatorio de la actividad cinegética entre los empresarios de caza, en especial el calado de la nueva emergencia cinegética consensuada en cuanto a "limitar la presencia de la caza mayor en las zonas donde antes no la había es fundamental para acabar con las tuberculosis", afirma Ignacio Higuero. Comparten además el incremento de cupos previsto en las zonas de caza.