El soldado Rubén Rangel Vizuete, de 25 años, fallecido hoy al producirse un desprendimiento de tierra mientras realizaban prácticas de escalada en el municipio pirenaico de Canfranc (Huesca), estaba empadronado en Ahillones (Badajoz), donde viven sus padres y familia.

Además del joven militar al menos otros tres han resultado heridos al producirse un desprendimiento de tierra mientras realizaban unas prácticas de escalada en la zona de Coll de Ladrones.

Según ha relatado a Efe Rosendo Durán, el alcalde de este pequeño municipio pacense de unos mil habitantes, los padres del joven son del pueblo, a donde regresaron hace unos años, y el propio joven está empadronado en el mismo y lo visitaba con mucha frecuencia "por lo que la noticia ha caído como una bomba".

Ha recordado que era un joven "muy alegre" y que en el pueblo, e al ser pequeño todos lo conocían, además que de con muchos existía relación de parentesco.

Rosendo Durán ha indicado que en cuanto la familia ha tenido conocimiento del suceso la noticia "ha corrido por todo el pueblo", que ya ha decretado tres días de luto por el fallecimiento.

Además, se ha puesto a disposición de la Delegación del Gobierno en Extremadura por si fuese necesaria si colaboración para el funeral, aunque desconoce cual será la decisión de los padres al respecto.