La hepatitis C es una de las 60 enfermedades de declaración obligatoria. Se llama así a las patologías que se consideran de gran importancia para la salud pública. Las agencias locales, estatales y nacionales exigen que estas enfermedades se notifiquen cuando los médicos o laboratorios las diagnostican. A través de esa notificación se permite recoger datos estadísticos que muestren la frecuencia con la cual ocurre la enfermedad, lo cual, a su vez, ayuda a los investigadores a identificar las tendencias de la enfermedad y a rastrear sus brotes. Esto puede ayudar a controlar brotes futuros.Otras enfermedades de declaracion obligatoria son la varicela, el sarampión, el carbunco, el botulismo, la brucelosis, gonorrea, difteria, cólera, hepatitis A y hepatitis B, legionelosis, paperas, peste, tosferina...