Los cuestionarios sobre los deberes arrojan los primeros resultados. Las encuestas que realizaron padres, alumnos y profesores el pasado marzo de 4º de Primaria y 2º de la ESO revelan cómo ve la comunidad educativa que los estudiantes se lleven tareas para casa. Y en general, no parece generar muchos problemas, es más, la mayoría quiere que se mantengan. La comisión permanente del Consejo Escolar se vuelve a reunir hoy para analizar con más detalle las respuestas obtenidas en las más de 11.000 encuestas (4.700 de alumnos, 4.200 de padres y 680 de los tutores) y sacar unas conclusiones y recomendaciones futuras que deberán pasar por el pleno del Consejo Escolar de Extremadura el próximo julio antes de ser derivadas a la Consejería de Educación. De momento, las primeras conclusiones de las encuestas, a las que ha tenido acceso este diario, elaboradas por un grupo de expertos, arrojan datos más favorables a mantener las tareas escolares para casa.
ALUMNOS: La mayoría cumple y dice que son interesantes
La percepción de los deberes varía ligeramente entre los alumnos de los dos cursos analizados. En ambos casos, sobre el 75% de los alumnos reconoce que hace tareas a diario, mayoritarimente solos, sin emplear nuevas tecnologías y en casa. En el caso de Primaria hay un 4,7% de los encuestados que afirma que no hace los deberes porque no tiene tiempo y otro 4,7% porque «no soy capaz de hacerlos» y esos porcentajes se elevan al 9,8% y el 11,6% respectivamente en 2º de la ESO.
El tiempo dedicado a estas tareas arroja cifras muy dispares. En 4º de Primaria, mientras el 36,8% emplea entre media hora y una hora al día, otro 29% no pasa más de media hora al día haciendo deberes y otro 25% dice que entre una y dos horas diarias. En 2º de ESO, el 37% pasa de una a dos horas al día haciendo deberes, el 30% entre media y una hora y hay un 16% que no dedica más de 30 minutos mientras otro 16% emplea más de dos horas. Así, dice el informe, «se podría cifrar en una media aproximada de algo más de una hora el tiempo dedicado a la realización de estas actividades educativas diariamente». Y este tiempo los protagonistas lo valoran de forma muy dispar: para los de Primaria es «bastante» para un 39%, «mucho» para el 21% pero «poco» para otro 39%; mientras que para los de ESO, para el 49% es «bastante», «mucho» para otro 32% y «poco» para solo el 18,6%.
Y otra conclusión clara: «los deberes escolares sí resultan de interés y utilidad para el aprendizaje de las materias curriculares según manifiesta el 70,5% del alumnado consultado» en Primaria. El 88,9% cree que los deberes son «buenos» para su educación. En el caso de los consultados en 2º de ESO, el 55% dice que los deberes son beneficiosos para el proceso se enseñanza-aprendizaje siempre y para el 33% a veces. «Estos datos resultan favorables sobre la conveniencia de mantener los deberes en este nivel educativo», dicen los expertos.
FAMILIAS: Más preocupadas en la ESO que en Primaria
Los padres y madres de los alumnos extremeños suelen conocer las tareas que sus hijos tienen para casa, la mayoría dice que las resuelve sin la ayuda de sus padres y la forma de afrontarlos es radicalmente opuesta en los dos cursos analizados. El 73% de los progenitores dice que sus hijos se enfrentan a las tareas en 4º de Primaria «con tranquilidad» aunque un 24% expresan su preocupación; mientras en 2º de ESO, los padres afirman mayoritariamente que afrontan con preocupación los deberes de sus hijos, es así para el 75,5% de los encuestados mientras que un 22% los asumen con tranquilidad. Y es que más del 80% de los encuestados cree que sí influyen en los resultados académicos de sus hijos.
Además, para el 47% de los padres los deberes son compatibles con el tiempo de ocio de la familia aunque para un 36% no es así «a veces». Sin embargo, la respuesta más repetida de los progenitores es que los deberes hay que mantenerlos, es el caso del 52% de los consultados en ambos cursos, mientras que un 39% considera conveniente disminuirlos y un 7% pide que desaparezcan.
PROFESORADO: Considera que refuerzan el aprendizaje
La mayoría de los docentes extremeños que han respondido los cuestionarios mandan deberes. En el caso de Primaria la cifra es mucho mayor que en Secundaria, el 81% frente al 12%, y en lo que sí coinciden es en que los alumnos suelen cumplir mayoritarimente con las tareas. Y los tutores creen que los que no los hacen es principalmente por «falta de voluntad». Asimismo, más del 50% manda las mismas tareas para todo el grupo pero entre el 30% y el 40% dice que adapta los deberes a las necesidades de los alumnos, «lo cual refleja la atención a la diversidad en esta práctica educativa», indican los expertos en las conclusiones de los tutores de Primaria, que alcanzan el mayor porcentaje.
En lo que también coinciden los docentes encuestados de 4º de Primaria y 2º de ESO es en que las tareas que mandan para casa ayudan a favorecer la adquisición de conocimientos, a generar hábitos de estudios y a fomentar la autonomía personal.
Las principales discrepancias con padres y alumnos se vislumbran en el tiempo previsible que conlleva realizar las tareas escolares. En 2º de ESO suponen entre 10 y 20 minutos para el 69% de los tutores y entre 20 y 40 minutos para otro 20%. Sim embargo, «sus percepciones no se corresponden con el que tiempo que dicen dedicarle según familiares y alumnos: de media algo más de una hora», destacan los expertos. En el caso de 4º de Primaria ocurre lo mismo: los tutores hablan de una media de entre 30 y 35 minutos mientras de las respuestas de alumnos y padres se obtiene una media de una hora y cuarto.
Otra evidencia que se puede extraer de los cuestionarios es que en el caso de la ESO, donde entran en juego diferentes docentes, existe «falta de coordinación entre el profesorado del mismo grupo para ordenar la realización de deberes en casa». El 64% de los tutores encuestados dice que no existe coordinación.
Aún así, entre el 75% y el 82% de los encuestados en ambos cursos considera que los deberes deben mantenerse. Un 20% en Primaria y un 11% en la ESO opina que hay que disminuirlos pero apenas un 3% y un 4,5% respectivamente se muestra partidario de su desaparición como práctica educativa.
Ahora, con todos estos datos sobre la mesa, entre otros, el Consejo Escolar tendrá que determinar la conveniencia o no de regular o coordinar los deberes escolares, tal y como le encargó la Asamblea de Extremadura.
