Representantes agrarios y sindicales han seguido negociando este miércoles el nuevo convenio del campo en un encuentro en el que el punto relacionado con el control horario se ha dejado sobre la mesa pendiente de un informe sobre su encaje jurídico, mientras que en el relativo a la jornada laboral no se ha avanzado.
La sede de APAG Extremadura Asaja en Mérida ha acogido esta sesión de trabajo, en la que han acordado la convocatoria de una nueva reunión en septiembre, según informa esta organización en una nota.
Según su presidente, Juan Metidieri, se ha producido acercamiento en algunos puntos como es la puesta en servicio de la tarjeta profesional agraria (TPA), que se entiende beneficiosa para todas las partes.
Con ella, destaca, se ganará "más agilidad" a la hora de que los trabajadores puedan realizar sus labores en el campo puesto que su formación estará acreditada sin necesidad de nuevos cursos.
En el punto relacionado con el control horario, se ha dejado sobre la mesa pendiente de un informe sobre la interpretación y el encaje jurídico a la hora de su aplicación.
Y en cuanto a la jornada laboral, las posiciones continúan en el punto de partida y sin acuerdo entre las partes, aunque se han emplazado a seguir las reuniones después del encuentro de hoy, celebrado en un "clima de diálogo".
Metidieri insiste en que APAG Extremadura Asaja seguirá trabajando "para buscar un acuerdo que sea beneficioso para el campo extremeño".
