Fraude en 4.000 contratos temporales

Junto al empleo sumergido, el plan del Ministerio de Trabajo permitió detectar también en el periodo entre agosto de 2018 y junio de 2019 un total de 3.772 contrataciones temporales de trabajadores que deberían operar como indefinidos, lo que supone un 14,7% más que el año anterior. También se regularizaron casi un millar de contrataciones a tiempo parcial de trabajadores que en realidad hacían más horas de las que recogían sus contratos. Hubo 945 actuaciones de este tipo, el doble que el año pasado (452).

En el caso de los contratos temporales, el plan de choque de la Inspección de Trabajo permitió sacar a la luz 1.700 contratos temporales en situación irregular, que se suman a los 2.068 que detectaron las actuaciones ordinarias de los propios inspectores (visitas programadas o por denuncias de trabajadores, principalmente). «Tenemos un grave problema en el sector primario, donde hay empresas que tienen a trabajadores empleados durante casi todo el año y a pesar de eso no tienen la condición de fijo o fijo discontinuo, sino de eventuales», lamenta desde CCOO su secretario de Organización Francisco Corbacho. Eso, añade, redunda en la «precariedad» de estos trabajadores. «Porque van a un banco a pedir una hipoteca y con un contrato eventual no se la dan, pero sí con el contrato fijo o fijo discontinuo que le correspondería».

En cuanto a las ampliaciones de jornada que se han producido tras la actuación de los inspectores, destacan las cifras en la provincia de Badajoz. En el periodo en estudio, los inspectores detectaron (al margen del plan de choque) un total de 745 contrataciones parciales fraudulentas, casi el triple que las actuaciones del año anterior (268).

Control horario

Para CCOO el control horario es una de las herramientas que está permitiendo detectar este tipo de fraudes. «Es algo muy habitual en la hostelería y hay trabajadores que se amoldan a lo que les ofrecen porque lo necesitan. Y si les ofrecen un salario de 1.000 euros pero cotizando por 500 con una jornada reducidas, ellos no se niegan y su empleador está pagando un 32% menos por ese trabajador a la Seguridad Social por ese empleado», lamenta Corbacho. R. C.