La cuarentena británica también ‘toca’ al turismo de Extremadura

Aunque muy lejos de la repercusión que tendrá respecto a otros destinos turísticos españoles, la recomendación británica de no viajar a España y la cuarentena impuesta para las personas que proceden de nuestro país también afectará al sector extremeño, principalmente al segmento del turismo rural.

La presidenta de la Federación Extremeña de Turismo Rural (Fextur), Victoria Bazaga, expresó a Efe que el turista británico representa en condiciones normales el 20% del cliente que pernocta en verano en los establecimientos extremeños ubicados en el entorno de la autovía Ruta de la Plata.

Como señaló Bazaga, se trata principalmente de ciudadanos que desembarcan en los puertos cantábricos y viajan en su coche hacia las costas del Algarve portugués y de Andalucía. En el trayecto de ida o el de vuelta, en múltiples casos pernoctan en la comunidad autónoma para conocer sus ciudades y parajes naturales, o atraídos por segmentos concretos como la ornitología o los deportes de aventura, entre otros.

Para la presidenta de Fextur, esta circunstancia supone «otro palo más» para el sector, pues este modelo de cliente «pasa uno o dos días» en la comunidad extremeña cuando decide pernoctar para visitarla. El sector espera que esta decisión no afecte a aquellos ciudadanos británicos con segunda residencia en la costa sur peninsular que hacen el trayecto en coche desde el norte español, pero sí acabará con este tipo de cliente que pensaba pasar sus vacaciones en un apartamento o en un hotel del sur.

Bazaga indicó que este tipo de noticias «preocupa» en un momento en el que se cancelan reservas con motivo de los últimos brotes en el país, lo que conlleva un freno a la evolución experimentada en las tres primeras semanas de julio. La ocupación durante esos primeros 20 días de mes, aunque lejos de los niveles de otros años, no había sido del todo mala.

El presidente de la Asociación de Empresarios de Servicios Turísticos de Extremadura (Setex), Antonio Martínez, subrayó a su vez que el peso del turista británico en los hoteles de la comunidad es muy bajo.

Sin embargo, sí preocupa que este tipo de medidas afecten en un momento en el que la comunidad extremeña apuesta por incrementar en los próximos años la presencia de turistas extranjeros en general, y británicos en particular. El temor es que este tipo de clientes puedan estar pasando días vacacionales en destinos de interior similares de otros países, y que estos aprovechen para fidelizarlos de cara a los próximos años.

El gasto de los turistas extranjeros que se alojaron en la comunidad autónoma aumentó el año pasado un 25,52% respecto al anterior, lo que sitúa a la región en la primera en crecimiento según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicados a partir de la Encuesta de Gasto Turístico (EGATUR). En números absolutos, ese incremento del gasto se cifra en 56,58 millones de euros, pasando de los 221,71 de 2018 a los 278,29 en 2019, según informó Turismo Extremadura.