El Consejo de Gobierno de la Junta autorizó ayer la compra del primer robot quirúrgico de Extremadura, que irá destinado al Hospital Universitario de Badajoz. Esta nueva tecnología sanitaria permitirá cirugías mínimamente invasivas y lleva asociada una inversión de 2,17 millones de euros que se cofinanciarán al 80% con cargo al Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). El Servicio Extremeño de Salud (SES) tiene previsto adquirir otro robot de las mismas características para el Hospital Universitario de Cáceres.
La adquisición de los robots estaba prevista para el año 2020, pero la pandemia retrasó la inversión y no ha sido finalmente hasta ahora cuando el Ejecutivo ha dado luz verde a la compra del primer equipo. Extremadura es una de las pocas comunidades que no dispone en la actualidad de esta tecnología tan innovadora y beneficiaria, tanto para los pacientes que precisen de ella como para los sanitarios, ya que les permitirá agilizar y mejorar las intervenciones que tengan que realizar.
Con el robot se realizarán cirugías mínimamente invasivas que para el paciente suponen «una mejora en la calidad, mejores resultados, menor necesidad de transfusiones y mejor recuperación», según destaca la reseña del Consejo de Gobierno. Estos equipos robóticos cuentan con varios brazos articulados y permiten operar a los pacientes a través de pequeñas incisiones por las que se introduce la cámara y el instrumental.
Los profesionales obtendrán mejoras en la visión tridimensional y de navegación; más facilidad de sutura y mayor ergonomía; precisión y práctica clínica; y un mayor control y avance en la curva de aprendizaje respecto a técnicas laparoscópicas. Se beneficiarán las especialidades quirúrgicas de Urología, Ginecología, Cardiología, Cirugía Torácica, Otorrinolaringología y Cirugía General.
Hay facultativos extremeños que ya se están formando en el manejo de esta última tecnología en los quirófanos. Lo hacen a través de distintas actividades que cada año realiza el Centro de Cirugía de Mínima Invasión Jesús Usón (CCMIJU) de Cáceres, que periódicamente acoge en sus instalaciones el robot Da Vinci (uno de los modelos disponibles en el mercado) y organiza jornadas intensivas para la formación de los profesionales que no han tenido acceso a estos avances.
