«Alqueva es hoy el mejor seguro que puede tener el Alentejo, sobre todo cuando el agua no cae del cielo». Esta declaración es del presidente de la Empresa de Desenvolvimento e Infraestruturas do Alqueva (EDIA), José Pedro Salema, a la agencia Lusa News y no es para menos. Ayer martes, 8 de febrero, se cumplieron 20 años del cierre de compuertas de este pantano, el más grande de Europa Occidental, y sus registros son más que positivos: alberga a fecha de hoy 3.275 millones de metros cúbicos de agua y la presa se halla a una cota de 148,3 metros cuando el máximo son 152. Ello representa estar al 78,5% de su capacidad. Para José Pedro Salema, el embalse alentejano tiene un volumen de agua aprovechable de 2.284 millones de metros cúbicos, una cantidad «más que suficiente» para atender las necesidades de riego de la zona durante los próximos dos años y medio aunque no llueva. 

Hay que tener en cuenta que durante estas dos décadas de desarrollo la zona regable de Alqueva ha experimentado un alza considerable de superficie. Los datos aportados por EDIA señalan que en la actualidad se riegan 120.000 hectáreas si bien hay puesta en marcha una operación de ampliación a 10 años de otras 30.000. Para ello se cuenta con 69 presas y represas, 47 estaciones elevadoras y 2.002 kilómetros de canales.

Nada que ver con este otro lado de la Raya. En Extremadura existe a fecha de hoy un problema de sequía con hasta nueve localidades con restricciones y una campaña de riesgo en peligro si no se presentan episodios de lluvia importantes en los próximos meses

La razón es simple: los embalses del Guadiana están al 30,48% de su capacidad en España, lo que quiere decir que toda la cuenca en su conjunto, con más de una veintena de pantanos, tienen menos agua que Alqueva en solitario. Exactamente 2.895 millones de metros cúbicos, 380 menos. 

En Extremadura la demanda de agua del regadío es muy importante, del orden de las 150.000 hectáreas, pero todos los embalses, algunos de gran capacidad, están construidos en afluentes del Guadiana y no como Alqueva que se construyó sobre el propio río Guadiana. Ello genera un menor caudal, dado que hay embalses de gran tamaño como La Serena, con 3.219 millones de metros cúbicos de capacidad, que albergan en la actualidad 473 millones de metros cúbicos, es decir, el 14,69% de su volumen máximo. Este embalse está costruido sobre el afluente del Zújar. Igual le ocurre al Cíjara, con 1.505 millones de metros cúbicos de capacidad, que contiene 268 o Alange, con 852 millones de metros cúbicos de capacidad que solo contiene 184.

Detractores 

La construcción de la presa de Alqueva tuvo desde el inicio muchos detractores. Hubo colectivos que realizaron una fuerte oposición a esta obra hasta casi el momento de su cierre de esclusas, en el año 2002, alegando que sus proporciones lo hacían inviable dado que nunca lograría con el caudal del Guadiana llenarse del todo. Sin embargo, el 12 de enero de 2010, se llenó al 100% y desde entonces se han tenido que realizar tres vertidos controlados al alcanzarse los 152 metros de la presa: 4.150 millones de metros cúbicos de agua.

La garantía de agua que brinda esta reserva estratégica ha permitido una gran adhesión de los agricultores a nuevos cultivos y técnicas de riego, pero además sus centrales hidroeléctricas aportan alrededor del 4% de toda la energía hidroeléctrica en Portugal.

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Alqueva también garantiza el refuerzo del abastecimiento público a más de 200.000 habitantes del Alentejo, número que tiende a crecer con la previsión de la conexión de Alqueva a otras fuentes de agua para abastecimiento público.

Además de la agricultura y la energía, el turismo, el ocio y los deportes náuticos también han encontrado en esta nueva realidad un motor para su expansión y desarrollo. Prueba de ello son las playas fluviales que se han creado, alguna incluso en el lado español como la situada en Cheles. También hay puertos deportivos, cruceros, paseos en barco o alquiler de embarcaciones, negocios que no son el objetivo principal por el que se construyó esta infraestructura pero que, de algún modo, están otorgando un modo de vida a mucha gente residente en esta región fronteriza.