Una investigación del Ejército israelí sobre el bombardeo del domingo pasado contra un edificio en Qana, en el sur de Líbano, en el que murieron 56 civiles admite un error pero acusa a la milicia chií libanesa Hizbulá de utilizar a los civiles como escudos humanos para sus ataques con cohetes. El jefe del Estado Mayor israelí, teniente general Dan Halutz, ha pedido disculpas por la pérdida de vidas civiles pero ha acusado a Hizbulá de "usar a civiles como escudos humanos y operar de forma intencionada desde localidades e infraestructuras civiles". Según el informe de la investigación, el Ejército hebreo no sabía que había civiles en el edificio bombardeado por la fuerza aérea. "Si la información hubiera indicado que había civiles presentes (...) el ataque no se habría llevado a cabo", indica el mando militar en un comunicado. Respuesta "contenida"El bombardeo se produjo después de que se hubieran emitido órdenes respecto al ataque de "estructuras sospechosas" en localidades en las que se hubiera advertido a los civiles de que evacuaran, añade el texto, destacando que las fuerzas de Hizbulá "utilizan estructuras civiles dentro de las localidades para almacenar armas y esconderse después de lanzar ataques con cohetes". Según el Ejército israelí, más de 150 cohetes habían sido lanzados desde Qana y los alrededores desde el 12 de julio, cuando comenzó la actual ofensiva israelí en Líbano después del secuestro de dos soldados hebreos por parte de Hizbulá. Por su parte, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, ha afirmado que la respuesta de Israel a Hizbulá ha sido "contenida", según publica hoy el diario Financial Times.. "Ningún país europeo habría respondido con tanta contención como Israel", ha añadido Olmert, al justificar los ataques israelíes en el Líbano.Más de 900 muertosEl primer ministro libanés, Fuad Siniora, ha asegurado que más de 900 personas han muerto en el Líbano desde el inicio de la ofensiva militar israelí contra este país. Siniora ha realizado esta afirmación en un mensaje de vídeo enviado a la conferencia que la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) celebra en Malasia sobre la crisis en Líbano.El mandatario ha añadido que durante la guerra no declarada entre Israel e Hizbulá alrededor de 3.000 personas han resultado heridas, un tercio de ellos menores de 12 años. Por último, ha lamentado que la ofensiva israelí afecta directamente a la vida de los civiles libaneses, las infraestructuras y la economía del país.Bombardeos en BeirutMientras, el Ejército israelí ha reanudado los bombardeos sobre Líbano. Aviones hebreos han atacado posiciones de Hizbulá en las montañas del sur de Líbano y varios barrios controlados por la milicia chií en Beirut. En la capital los ataques han tenido como objetivo emplazamientos de Hizbulá en los suburbios del sur de la ciudad, algo que no ocurría en los últimos días.Según algunos testimonios, al menos cuatro explosiones se han producido a consecuencia del lanzamiento de varios misiles en el distrito de Dahieh, de mayoría chií, una zona ya castigada por los bombardeos pero que en los últimos días no había sufrido ataques.La aviación israelí también ha bombardeado diversas zonas en las montañas del sur de Líbano, atacando varios puntos del territorio de Lweizeh, Jbaa, Sarba y Ein Bousuar, a más de 20 kilómetros de la frontera con Israel. Además, sobre el terreno continúan las violentas batallas entre los soldados hebreos y la milicia libanesa chií de Hezbolá, en las ciudades libanesas fronterizas con el Estados judío.